Ha tenido a bien el escritor y poeta tumaqueño Carlos Vásquez-Zawadzki, rendir un sincero reconocimiento y homenaje a su paisano Guillermo Payán Archer, mediante la edición del libro antológico de su poesía. Este libro fue seleccionado en la Colección Artes y Humanidades Poesía del Programa Editorial de la Universidad del Valle en Cali. Colombia.
El poeta Guillermo Payán-Archer (Tumaco,1921-Riohacha,1993) es peregrino (del lat. peregrinus) o viajero por el litoral Pacífico, país y el mundo; residió en New York, y como corresponsal periodístico en La Habana y Buenos Aires.
Al leer y degustar el libro encontramos que: Aquí, para la Antología poética, lo hemos nombrado “Peregrino de luz y mar” que, en su significado más clásico, se refiere al viajero que "por vocación o por voto, visita un santuario o algún lugar considerado sagrado". Caminante permanente, Payán-Archer se encuentra en su escritura con el Mar Pacífico, cuya madre es Yemayá, la primera orisha del universo: la deidad nació cuando Olofin, hijo del dios supremo, decidió crear el universo "después de apagar con agua el fuego que envolvía el planeta". De Yemayá y Obatalá nacerían dieciséis orishas del panteón yaruba.
Payán-Archer nombra entonces el Pacífico pluriétnico y pluricultural sus ocasos anaranjados y azules; así mismo, sus amaneceres de fuego y luz ascendente, y el radiante horizonte que los circunda en una mirada infinita. Nombra viajes de alegría y temores. Nombra los cuerpos cimbreantes y sensuales del amor y del trabajo. Nombra islas y misterios de lo insondable y desconocido. Nombra recuerdos familiares y amistosos. Nombra el furor del litoral y sus pasiones nunca olvidadas. Nombra en su escritura rítmica y maravillosa musicalidades, armonías y mundos -imaginarios del Pacífico-, como los desearía Rimbaud o Saint-John Perse.
Describe Vásquez-Zawadzki que el “yo lírico” en el conjunto de la obra poética del tumaqueño Guillermo Payán Archer empieza a partir de la publicación de La Bahía iluminada (1944) y Noche que sufre (1948) hasta sus últimas obras conocidas, La cábala y el signo (1987) y Selección de poemas (1988), incluso el conjunto de narraciones de Trópico de carne y hueso (1974), se construye, deconstruye y reconstruye dialécticamente en la oposición eros y thánatos.
La Antología “peregrino de luz y mar” comprende las siguientes obras literarias:
- La Bahía Iluminada (1944): 18 poemas.
2. Solitario en Manhattan (1953): Poema a Luis Zalamea.
3. La palabra del hombre (1958): Poemas “Estos golpes de Dios” y “Oración desde Bowery Street
4. Los cuerpos amados (1963): Poemas “Víspera de la Muerte”; “Oda a Detroit bajo la nieve”; “Imágenes”;” Voz clamante”; “Los cuerpos amados”.
5. Poemas del éxodo (1973): 19 poemas.
6. Los soles negros (1980): 9 poemas.
7. El mar de siempre (1983): 7 poemas.
8. Ceniza viva (1985): 8 poemas.
9. La cábala y el signo (1987): Poemas “Alfa y Omega y el arcano”; “La barca de la muerte”; y “Miércoles de ceniza”.
La poesía de Payán Archer son estallidos de luz y olas marinas, aromas, pieles y cuerpos del amor, dirigida ahora a nuevas generaciones de lectores colombianos e hispanoamericanos, en un volumen antológico impecable publicado por el Programa Editorial de la Universidad del Valle, sitio en donde se puede adquirir el libro en sus versiones impresa y virtual.
Los admiradores de la poesía de Memo Payán y el Pacífico en general, estamos de plácemes con esta Antología “peregrino de luz y mar”. Enhorabuena.