No dudé un minuto en aceptar la propuesta de viajar de Curazao a San José del Guaviare para hacerme cargo de la operación de Supergiros en esta zona del país.
Sabía que en esta zona selvática de los llanos orientales de Colombia, además de gente maravillosa, encontraría secretos escondidos que valdría la pena contar.
Y vaya que los encontré. Esta región es una fábrica inagotable de paisajes, pero sobre todo de atardeceres épicos.
Soy un aficionado a la fotografía con móviles y me he especializado en capturar instantes con esta herramienta digital que incluso sirve para hablar a través de ella.
Con mi móvil he recorrido los cuatro municipios del departamento que vivieron épocas difíciles que, afortunadamente, son cosa del pasado.
Quiero compartirles mis capturas, una cacería de segundos que se inmortalizan para siempre y que invitan a que observadores de aves, turistas del mundo entero y ciudadanos orgullosos visiten esta tierras de la que después de estos atardeceres nadie se quiere ir.
Les comparto con mucho cariño mi galería de imágenes: