La computación en la nube es, desde hace unos años, la mejor forma de procesar la información. Se ha convertido impulsor de la economía digital del mundo puesto que está ayudando a las empresas a hacer más con menos. Los gobiernos, las grandes corporaciones y las pequeñas empresas están recurriendo cada vez más a infraestructuras y soluciones basadas en la nube para almacenar sus datos confidenciales y administrar sus operaciones.
En concreto, la nube es solo una vasta masa de computadoras conectadas a Internet en las cuales las personas o las empresas pueden alquilar potencia de procesamiento o almacenamiento de datos según lo necesiten. Ofrece abundancia, estabilidad y seguridad. Se utiliza para todo, desde alojar sitios web hasta almacenar archivos y ejecutar operaciones masivas de procesamiento de datos. Su servicio principal es lo que se conoce como Infraestructura como servicio o IaaS (Infraestructure as a service).
Las principales ventajas están en la reducción de costos al poder virtualizar y aumentar o disminuir servicios según las necesidades. Como resultado, hay menores costos de mantenimiento, instalación, hardware, soporte y actualización. Otro gran beneficio es la flexibilidad de poder acceder a datos y archivos relacionados desde cualquier ubicación y desde cualquier dispositivo en cualquier momento con una conexión a Internet. A medida que el proceso de trabajo cambia a flexible y remoto, es esencial proporcionar este tipo de acceso a los empleados.
Una nube pública es aquella en la que el proveedor de servicios ofrece los recursos a través de Internet, de forma gratuita, o mediante el cobro de una suscripción o pago por uso de algunos recursos. Los recursos varían según el proveedor, pero pueden incluir capacidades de almacenamiento, aplicaciones o máquinas virtuales. La nube pública permite la escalabilidad y el intercambio de recursos que de otra forma no sería posible para una sola organización.
La seguridad es un factor clave de estos en la computación en la nube, puesto que, a medida que más empresas la utilizan, mayores son los ataques que se presentan. Los proveedores emplean personal de seguridad especializado en ciberseguridad para automatizar las funciones de seguridad y monitorear el sistema en busca de anomalías. Se utilizan métodos de cifrado y cumplimiento de protocolos.
El líder mundial en servicios de la nube pública es Amazon Web Services – AWS, que utilizan aplicaciones populares como DropBox y Foursquare, pero en la competencia están reconocidas empresas como Microsoft Azure, Alibaba, Google Cloud Platform e IBM Cloud, que buscan una tajada de este lucrativo y creciente mercado. En Colombia, Siesa Cloud Servicies combina todos los beneficios del software como servicio y la computación en la nube con la tecnología y respaldo de Siesa, lo que permite integrar los procesos de la soluciones de Siesa con la tercerización del almacenamiento de información, la administración de datos y el mantenimiento de recursos IT.
En 2018, los cinco principales proveedores consolidaron el 77 % del mercado global. Una consolidación que se viene dando en los últimos años y que se estima continuará a medida que las organizaciones y los desarrolladores busquen plataformas estandarizadas y ampliamente compatibles para desarrollar y alojar sus aplicaciones en la nube.
Cuota del mercado mundial de servicios de computación en la nube públicos (en millones de dólares)
Hosting Tribunal pronostica que el mercado global de computación en la nube superará los US$200 mil millones en 2019, un crecimiento cerca del 20 % con respecto al año anterior. Además, que las iniciativas en la nube representarán el 70% de todos los gastos tecnológicos para 2020 y el 80% de las organizaciones migrarán hacia la nube para 2025. Un futuro bastante prometedor.
