Las críticas de Iván Mejía a Juan Carlos López vienen desde hace mucho, desde que empezó su nefasta administración en el 2004. No le gustaba su impostura de hombre muy bien educado de Popayán, sus ganas de figurar y, sobre todo, sus números nefastos: Millos casi baja a la segunda división en su administración, instauró a ese mal que fue el Chiqui García en el equipo. Muchos le daban duro a Iván Mejía en esa época porque era el único que se le paraba y le hablaba claro a López. Afortunadamente llegó José Roberto Arango y sanó los 33 mil millones que dejó López después de salir del equipo.
Siete años después se vuelven a encontrar en una disputa. Justo cuando López es llamado a ser director del ICBF en una jugada absurda del cada vez mas impopular Santos. Ayer, en la entrevista que le hicieron en la W, el gordo querido se despachó con estas palabras “López no tiene la menor idea de administración. Su paso por Millonarios fue caótico, ruinoso, dejó a Millonarios totalmente acabado” y recalcó “Pobre niñez en manos de este sujeto”. Lo siguió machacando diciendo que “nunca consiguió nada, se equivocó en todas las contrataciones, no trajo sino paquetes” y que “sus medidas económicas fueron absolutamente ruinosas”. Yo creo que el doctor López volvió a encontrarse entre sus pesadillas a Iván Mejía y prefirió dar el paso al costado.
Muchos odian a Iván por su estilo frentero pero miren todos la prueba de que denunciar, y con vehemencia, a veces sirve para algo. La presión de Iván Mejía desde su twitter y desde el Pulso sirvió para que a López no le quedara de otra que presentar su renuncia. Otro punto que se le anota al hombre que encadena la radio en los mediodías colombianos