Tensión en la mesa de negociación del Gobierno venezolano con la oposición. A través de una declaración en la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, jefe de la delegación de la administración del presidente Nicolás Maduro, informó que el empresario colombiano Álex Saab, preso en Cabo Verde desde 2020, hará parte del diálogo.
"(El equipo) quiere informar a la opinión pública la decisión de incorporar al diplomático venezolano Álex Saab como miembro pleno de esta delegación, de la delegación del Gobierno bolivariano", anunció Rodríguez.
El negociador aclaró que quieren que Saab haga parte de la mesa social que fue acordada anteriormente entre las partes en el segundo ciclo de los diálogos.
El Gobierno y la oposición comenzaron los diálogos en México el 13 de agosto y se espera que una tercera ronda de negociaciones se desarrolle entre el 24 y 27 de septiembre.
El empresario colombiano fue arrestado en 2020 cuando su avión hizo escala en Cabo Verde como una respuesta a la demanda de Estados Unidos a través de la Interpol en la que se le acusaba de lavado de dinero y por ser presuntamente testaferro del presidente venezolano Nicolás Maduro.
Para la facción chavista, en la detención de Saab, se ha violado “toda la normativa internacional” y “todos los derechos humanos y los derechos al debido proceso”. Además, dicen que Saab se encuentra “secuestrado en una cárcel internacional” y alega que la detención fue ilegal pues el empresario estaba en una “misión oficial”.
Hace unas semanas, las autoridades de Cabo Verde declararon como constitucional el pedido de extradición de Saab hacia Estados Unidos.
La determinación intensificó la tensión entre ambas partes. La delegación opositora, la Plataforma Unitaria de Venezuela, se pronunció mediante un comunicado. La oposición le pidió a Noruega, el país mediador de las negociaciones, “que garantice el cumplimiento por parte de la delegación del régimen de las normas de reserva acordadas que rigen el proceso”.
Además, recalcaron que: “El anuncio de la solicitud incorporación realizada hoy, corresponde a una estrategia de defensa del régimen ante el proceso judicial entre dos países con separación de poderes y democracia, cuyos órganos jurisdiccionales siguen un proceso de extradición”.
La delegación fue enfática en decir que no aceptarán “distracciones” en el proceso de negociación y de su objetivo principal “un Acuerdo Integral que nos regrese la democracia y la posibilidad de salir de la inmensa crisis social, económica y política que nos afecta a todos”.
Tras el anuncio, se prevé que los diálogos se vean afectados, pues ya en el pasado se ha acusado a Maduro de negociar de “mala fe” y de aprovecharse de las conversaciones formales para evadir ciertas presiones políticas. La incorporación de Saab puede generar más desconfianza entre las partes.
La decisión del chavismo abre una variedad de desenlaces. Tal como le dijo Oswaldo Ramírez, analista político, a France 24 una de las posibilidades es que el Gobierno de Maduro esté buscando que la oposición se levante de la mesa. La incorporación podría considerarse como “una excusa del régimen de Nicolás Maduro para frenar el proceso de negociación”.
Lo mismo cree Pablo Quintero, politólogo, quien también en diálogo con France 24 dijo que el caso Saab representa “una estrategia que se veía venir por parte del Gobierno para forzar a la delegación a levantarse de la mesa, me refiero a la delegación de la oposición”.
Ramírez cree que puede ser que “lo que está persiguiendo el Gobierno es que sea la Alternativa Democrática quien se levante de la mesa y trate de generar un veto por la presencia de Álex Saab. Quizás para ellos puede ser una especie de salida fácil, lo que pone a la Plataforma Unitaria en una situación relativamente complicada”.
Igualmente, los analistas señalan en los intereses del Gobierno en proteger a Saab.“Es evidente que el chavismo necesita protegerlo de alguna forma. Y están dispuestos a sacrificar cualquier intento de diálogo con la oposición a cambio de que ese señor no pise los Estados Unidos”, añadió Quintero.
Por su lado, Ramírez anotó que la situación de Saab es crítica y que este martes “se está llevando en Colombia, en la ciudad de Barranquilla, una audiencia preparatoria de pruebas sobre los delitos de evasión de responsabilidades tributarias, aduaneras y de tratar de ver esos temas asociados a los delitos de lavado de activos, enriquecimiento ilícito, concierto para delinquir y exportaciones ficticias. Entonces, estamos en la presencia de una situación que puede complicar esta mesa de negociación”.
Ahora, Quintero también explicó que el fracaso de las negociaciones podría debilitar a la oposición y llegar a dividirla. “Una oposición que se regresa a Venezuela sin nada que presentar a su electorado de cara a las elecciones del 21 de noviembre es una oposición más debilitada, más fracturada”, afirmó Quintero, quien también señaló que esto puede llevar a desilusionar al electorado.
Quedan muchos escenarios posibles, pero la gran pregunta, concluyó el politólogo, es si Noruega aceptará la inclusión de Saab. Ramírez también enfatizó en que la Plataforma Unitaria debe manejar la situación con mucha prudencia.
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