A pesar de que lo leí más de cuatro veces y que pedí a una especie de lazarillo que me hiciera el favor de volverlo a leer porque no daba crédito a lo publicado en la página 16 Metro/Radar del prestigioso diario conservador de Envigado, El Colombiano, correspondiente al viernes 30 de noviembre del ya casi agónico año del 2018, esto fue lo que me encontré y para más señas lo reproduzco tal cual apareció en el diario leer de los antioqueños.
“El municipio de El Bagre, de la mano de su alcalde Ángel Mesa Castro, planea su futuro de cara al año 2030. La alcaldía informó que tras 48 horas de trabajo entre la administración, la Agencia de Renovación y más de 70 líderes comunitarios, se firmó el pacto municipal por la transformación del territorio, que busca ser la hoja de ruta de los próximos 12 años”.
Así dice el texto y la pregunta que me asaltó, porque ahora en medio de esta inseguridad hasta las preguntas lo asaltan a uno, fue: ¿de dónde acá una persona como el alcalde Ángel Mesa Castro, quien está detenido en su casa y a órdenes de la justicia, se le da por convocar semejante aventura. Luego me enteré de que el evento sucedió en El Bagre por cuenta del actual alcalde encargado, cuyo origen todavía se desconoce, quien lideró este nuevo episodio, dentro de los tantos inexplicables que solo ocurren allá en la tierra del olvido, en donde al parecer no pegaron las normas que rigen para el resto del territorio nacional. Habrá que decir que a la hora de redactar este pastiche, 10 y 15 de la mañana del primer domingo de Adviento, es decir, 2 de diciembre, no he conocido ni la más remota reseña de ese acto en la página web, como debería ser, de la Agencia de Renovación del Territorio, o que su directora, Mariana Escobar Arango se haya referido al tema. Si alguien puede ayudarme en esto, le agradezco.
El caso de El Bagre, además de trágico y cae a los extremos de la comedia con un alcalde encargado a las malas, cuyo nombre es Leonardo José Álvarez Parra, nombrado por su señoría como Secretario General y de Gobierno, quien luego de los enredos judiciales del titular, le tocó bailar con la más fea y convertirse de la noche a la mañana en la primera autoridad de un municipio que quizá nunca oyó mencionar en su vida profesional, porque además cuentan que es un excelente profesional del derecho, lo cual aquí no es tema de controversia.
El llamado que hacen muchos ciudadanos y que aquí recogemos va dirigido al señor gobernador, Luis Pérez Gutiérrez, quien deberá designar a un nuevo mandatario para lo que resta del período y es que a pesar de que tenga orígenes en el partido político que avaló al administrador hospitalario, sea una persona que tenga la capacidad de enderezar la nave que está a punto de naufragar, por decir lo menos. Ocurre que en principio Opción Ciudadana había perdido la facultad de presentar la terna correspondiente, pero en las últimas horas se le concedió la oportunidad y en manos de sus directivas está esa decisión. Como bagreño le pido al señor gobernador que “piense en grande” y nombre a una persona que por lo menos traiga un mensaje de esperanza a este pueblo lleno de problemas que ni siquiera tiene en sus calles un calabacito alumbrador para estas navidades.
