Por estos días los medios virtuales de comunicación de la Ciudad Jardín de Colombia no pasaron por alto los hurtos a establecimientos públicos, viviendas y a ciudadanos a mano armada a plena luz del día, por delincuentes que no han sido identificados por las autoridades de este municipio, casos que se han venido incrementando dejando zozobra a diestra y siniestra.
A mediados de agosto, desde la página oficial de Facebook de la Alcaldía de Fusagasugá han resaltado múltiples acciones en pro de garantizar la seguridad en los diferentes sectores donde se ha registrado mayor riesgo, pero estas no pasan de ser capturas por ‘gramitos’ de sustancias alucinógenas, violencia intrafamiliar, lesiones personales y uno que otro vehículo recuperado.
Las acciones y recompensas de hasta 10 millones de pesos anunciadas por el alcalde de esta municipalidad para dar con el paradero de los ladrones de establecimientos, como es el caso de la tienda naturista La Abuela y dos supermercados, hechos llevados a cabo en menos de 24 horas, no han mostrado resultados.
Por su parte, el gremio de comerciantes pregona en las redes sociales que están mamados de tanta inseguridad, y un par de concejales, ojalá no haya sido por populismo, aprovecharon la situación para convocar a una marcha el pasado 20 de agosto, en la cual exigieron acciones inmediatas al mandatario de turno.
Esperamos que con la recompensa de los 10 millones de pesos y el anuncio de mayor presencia policial, Fusagasugá retome ese color de calma que tenía años atrás, cuando una alcaldesa muy ruda le apostó a la seguridad y tranquilidad de propios y visitantes de la Ciudad Jardín de Colombia, con mano dura.
