Con la operación parada en medio de demandas penales, reclamos de proveedores y empleados, las aerolíneas de bajo costo Viva Air y Ultra Air continúan buscando cómo salir de la turbulencia.
Francisco Lalinde, CEO de Viva Air, acaba de ganar tiempo con la decisión de la Superintendencia de Sociedades de aceptar que la empresa inicie un proceso de reorganización administrativa y operativa y lograr acuerdos de pago de deudas con empleados, proveedores y el sector financiero, entre otros.
Mientras, Viva recibe este tanque de oxígeno tras la imposibilidad de concretar el proceso de integración con Avianca, Ultra Air continúa en sala de espera porque la Superintendencia de Sociedades todavía no ha admitido la solicitud presentada por la empresa del CEO William Shaw el pasado 4 de abril de 2023.
Si el superintendente, Billy Escobar, no admite la solicitud de Ultra Air el próximo 13 de junio cuando se vence el plazo de 10 días para tomar su decisión, la aerolínea que al igual que Viva Air tiene la operación parada, se irá a liquidación total.
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