Era otro viernes tranquilo en La Boquilla. Los esposos franceses René y Dominique Torá alquilaron una carpa al lado del mar cuando llegaron los pide-pide, jóvenes que tratan de ganarse la vida ofreciéndole servicio a los turistas que llegan a Cartagena. El matrimonio pidió dos pescados, tres cervezas y una botella de agua. Además tuvieron que aceptar una picada de mariscos. Después de comer los sorprendieron con la cuenta: tenían que pagar 850 mil pesos. René buscó en sus bolsillos algo para contentarlos y les dio cien mil pesos. Los pide-pide no se iban a conformar con eso.
Eran las siete de la noche y los franceses caminaban por una zona oscura de la Boquilla cuando los mismos muchachos que quisieron estafarlos les pusieron un cuchillo en el cuello y los obligaron a darle todas las prendas que tenían. El francés es un banquero jubilado de Marsella. Vinieron a Colombia por consejo de su hijo. Ahora no sabe si volverán.
El dueño del Restaurante Rey Arturo, al que pertenecían las carpas, quiere que se aclare la situación y puntualizó que los jóvenes no pertenecían a la nómina del restaurante. No es la primera vez que se presentan este tipo de abusos en La Boquilla.
Info: ElHeraldo.co