Nacho Vidal dijo hace una semana larga que con el perdón de las flaquitas, las gorditas son mejores en el escritorio de actor porno: la cama. Vidal dijo que aunque cada mujer es un mundo diferente, su laaaaarga experiencia le ha enseñado que las gorditas “son más calientes. Son más ricas”. ¿Mañé el comentario?, sí, pero recibámoslo desde su experiencia.
Paralelamente, un blog mexicano publicó las “7 razones por las que las ‘gordibuenas son muy buenas en la cama” lo que reafirma lo asegurado por Vidal.
En esta segunda publicación se asegura que es un hecho científico que “los hombres están cableados genéticamente para ser atraídos sexualmente por una mujer con curvas”, que las gordibuenas se tienen confianza, que su apetito en la mesa es directamente proporcional al sexual, que sus pechos y sus traseros las pone en ventaja, y que sus cuerpos rellenitos son el mejor sitio de descanso después de una tremenda faena con ellas.
Flaquitas, ¿se están preocupando? Pues hice una encuesta entre mis amigos y la mayoría coinciden con esta información: que las prefieren rellenitas:
— “Las gorditas se quieren y quieren su cuerpo, se tienen más confianza y son más seguras”.
— “Me gustan caderoncitas y con piernas gruesas. No importa tanto la cara”.
— “No apagan la luz, no hay histeria por nada ni frases como ‘ay gordo, el espejo’…
Nuestro sexólogo de cabecera de En Blu Jeans, Dr. José Manuel González, dice que científicamente las gorditas asimilan más cantidad de ácidos grasos, que son los que estimulan las hormonas relacionadas con lo romántico y lo erótico, lo que les da mayor capacidad para retenerlas.
“La sociedad les hace bullying a las mujeres con ese prototipo, pero lo cierto es que el 40 % de las películas porno son con gorditas y hay páginas web porno también que son de solo gorditas, y eso dice mucho de lo que los hombres buscan”, dice González.
Mis queridas lectoras, Nacho Vidal dice que se queda con las latinas y con las gringas por su performance, eso sí… gordibuenas. Aunque este personaje no es propiamente mi ídolo, concluye en su artículo con algo que va mucho más allá del simple aspecto carnal que lo identifica y que me parece increíble viniendo de él, un hombre al que conocemos por el placer de lo puramente físico, porque termina en lo que es la esencia del ser humano, su parte emocional:
Lo único que yo sé es que a las mujeres les encanta un hombre que las haga reír y cuanto más, mejor. No hay que ser un bobo, no hay que ser un chulo, no hay que ser un atrevido; lo que hay que ser es uno mismo, risueño, extrovertido, agradable, educado, divertido. Divertirse, reírse con ellas.
A las gordibuenas mis felicitaciones y a usted señor lector: ¿Cuál le gusta?
¡Hasta el próximo miércoles!
Publicada originalmente: 22 abril de 2015