Se encuentran en un hospital superando una enfermedad propia o de un familiar, a las que han perdido un hijo en cualquier circunstancia, a las que se sienten profundamente solas y con una carga muy profunda, que por momentos agobia y las desespera; a las que son víctimas de maltrato, a las madres cabeza de familia y a las víctimas del conflicto armado que han estado o están actualmente presas del pánico, bien sea por el hostigamiento y la violencia ejercida por grupos guerrilleros, paramilitares, bandas criminales, el Ejército, el mismo Estado, los gota a gota o la inmensa ola de delincuentes que hoy reina en las ciudades de Colombia.
Feliz día a las madres de Soacha y a las mamitas que se encuentran en una clínica de reposo, en una cárcel, en la habitabilidad de la calle, ejerciendo la prostitución y separadas de sus hijos: deseo de corazón que las cosas mejoren significativamente en sus vidas, y que el día menos inesperado comiencen a ver luz y soluciones sanadoras en su camino.
Feliz día a cada una de las mamitas que le dedicaron un instante a la lectura de este mensaje, a las mamitas de mí familia, a las mamitas excompañeras de trabajo y a todas aquellas con las que tuve el honor en algún pasaje de la vida, de ser su maestro: les deseo valentía, amor recíproco, salud, bienestar, sabiduría, progreso y mucha tranquilidad.
Feliz día para sus mamitas de parte mía, en caso de que sumercé no sea mamita y feliz día para todas aquellas mamitas que no conozco y me siguen en facebook, porque se identifican con mi pensamiento y encuentran en mis mensajes una voz de apoyo, resistencia y solidaridad.
También a las madres uribistas, les deseo de corazón feliz día y ojalá algún día puedan dejar de vivir engañadas. A todas mis respetos y admiración.
Carpe diem