El gobierno Petro se dará la pela e incluirá en la próxima Reforma Tributaria (que se radicará el 7 de agosto) un impuesto a las bebidas azucaradas, es decir a las gaseosas, los jugos de caja y las bebidas isotónicas que consumen los deportistas.
Aunque el nuevo ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, no dio mayores detalles, advirtió que será transitorio. El impuesto a las gaseosas ha llegado varias veces al Congreso pero el lobby de los empresarios de estas bebidas no ha permitido su aplicación. La directora de Red PaPaz, quien ha dado una dura lucha por establecer este impuesto, cree que ahora sí le llegó la hora a las gaseosas.