La pasada encuesta de aspirantes a la Presidencia de la República (Invamer Gallup) nos entregó cifras preocupantes para algunos y satisfactorias para otros, pero la verdad falta mucha “tela por cortar” y el compromiso como se enfrenten los temas de campaña harán que por encima de las encuestas, tan cuestionadas de repente salga un outsider (fenómeno) que cambie la dinámica política.
Un candidato outsider es quien nace común y corriente en aquellas democracias donde por diferentes aspectos se agota el establecimiento y se fortalece por ser antiestablecimiento, cuando el sistema de partidos es pluripartidista, el voto se fragmenta. Son neopopulistas (su base es difusa) y pueden ser autoritarios o excesivamente democráticos.
Outsider es alguien que crea un nuevo espacio político por fuera de las reglas de juego establecidas (antipolítico en algunos casos), es quien rompe paradigmas y esquemas de la política tradicional por crisis de gobernabilidad, la concentración de poderes familiares o roscas en los partidos que no permiten su circulación, también surgen producto de la corrupción y cuando la polarización es tan fuerte que se requiere una tercería.
Presidentes outsider en Latinoamérica han sido: Violeta Chamorro, Alberto Fujimori, Hugo Chávez, Rafael Correa, actualmente Donald Trump, y Macron. La fatiga electoral por la polarización y corrupción es el “caldo de cultivo” para este surgimiento de opciones que puede ser antípolítica en los escenarios políticos, en algunos casos es tal la inexperiencia de los outsider que no perduran, en otros se vuelven dictadores y ese es el peligro latente y vigente, pero ello es culpa de dirigentes que se apoderan de los partidos y sectores.
En Colombia puede que surja con fuerza un candidato con maquinarias y poder económico, entre los que están en búsqueda de la Presidencia también observo a algunos que pueden irrumpir y hoy no aparecen con fuerza y maquinarias, también puede emerger alguien que se defina con la paz o con la confrontación contra el gobierno Santos y la revisión del proceso de paz diferente y no está en el abanico de opcionados. ¿Será que puede salir dentro de un “cubilete” un estadista o un ilustre personaje o desconocido que cambie el “mapa” político? Los que apoyan el actual proceso de paz tendrán aspirantes y los que se oponen a la forma como se hace igualmente, ¿será que de los actuales hay un outsider?, ¿estará en camino para salir de un momento a otro?
La verdad, hay candidatos de todas las tendencias pero algunos lucen más como aspirantes al Congreso, Alcaldías y Gobernaciones que para la Presidencia de la República. Además, como tienen que aspirar en la primera vuelta con su fórmula Vicepresidencial si van hasta el final se pierden la posibilidad de ocupar el segundo cargo de la nación. Hay alianzas excelentes a “primera vista”; sin embargo, el debate electoral dirá quién es quién, ¿esperamos al outsider o no?