Nuevamente Venezuela atrae las miradas de la comunidad internacional, la razón esta vez no tiene que ver con la escasez de alimentos (según el gobierno, producto de la guerra económica hacia el modelo económico venezolano), con la elevada inflación que se vive, o con las nuevas “medidas económicas” que el ejecutivo ha tomado para fortalecer la economía nacional y hacerle frente a la continua y desenfrenada devaluación de la moneda frente al precio internacional del dólar y las otras monedas.
Venezuela o los venezolanos son ahora noticia mundial por la migración masiva que se está presentando producto de muchos factores, incluidos los señalados en el párrafo anterior.
Diferente a la estupidez del gobierno de Nicolás Maduro, quien por medio de Diosdado Cabello y su ministro de comunicaciones Jorge Rodríguez han salido a decir que el éxodo venezolano es un montaje. Lo que vi en las calles de Colombia en una visita reciente fue venezolanos por todas partes, venezolanos en terminales terrestres, marítimas e incluso áreas. Los vi viajando, trabajando de manera formal e informal. Son los que te venden el pasaje de abordar hasta los que te ofrecen servicio de llamadas, internet o te ofrecen cualquier producto en un local comercial, o fuera del local te ofrecen bebidas como jugos de naranja y otras bebidas en semáforos y sitios turísticos. Esa realidad la he visto por casi 5 años que llevo radicado en Quito, Ecuador.
Con mucha tristeza vi un noticiero en Colombia, Noticias Caracol… y este tiene una sección exclusiva para hablar de los venezolanos que salen a probar suerte en otras latitudes. Pero en mi tiempo en Colombia jamás vi este canal haciendo una sección exclusiva para hablar del éxodo masivo que producen los grupos paramilitares y guerrilleros en Colombia, un desplazamiento forzado que ha dejado sin techo y sin tierra a aproximadamente 6,2 millones de desplazados internos según el más reciente informe anual conjunto con el Consejo Noruego para Refugiados (NRC, por sus siglas en inglés).
Millones de colombianos/as, muchos/as de ellos/as se fueron a Venezuela a rehacer su vida, y ni qué hablar de aquellos/as que se fueron a Venezuela por las luchas territoriales de los carteles de la droga, pero este noticiero no hizo una sección especial para hablar de ese fenómeno que está presente y latente. La pretensión de este escrito no es otra que hacernos un llamado de atención para darnos cuenta como es manipulada nuestra opinión y el rol que juegan los medios masivos de comunicación en su tarea de solapar escenarios adversos económicos para su país. por ejemplo, en mi estadía en Colombia, el ministro de Hacienda Pública del nuevo gobierno anunciaba que tenía que subir impuestos y cobrar el impuesto a la renta a las personas que ganan un millón novecientos mil pesos (1´900.000), algo así como seiscientos veinte dólares americanos, adicionalmente mencionaba que el Estado debía quitar los subsidios estatales a los servicios básicos de los estratos 1, 2 y 3.
De este tipo de noticias poca o nada de cobertura hace el medio local de televisión, que a propósito, es el más visto a nivel nacional. Este medio, y otros medios de comunicación no tienen una sección que investigue e informe a los/as colombianos/as del por qué en pleno siglo XXI siguen muriendo menores de edad por desnutrición, algo que solo podríamos imaginar que pasa en países del continente africano, pero en Colombia sigue siendo una causa de mortalidad, al punto que en lo que va corrido del año, ya son dieciocho los niños que han fallecido según cifras oficiales (desconocemos aquellas que nos esconde el oficialismo).
Aquí en la mitad del mundo, donde ahora resido, el gobierno ecuatoriano presentó e impulsó la ley de fomento productivo, misma que según muchos/as no hace otra cosa que condonar deudas a aproximadamente 50 grandes empresas del país, entre las que se encuentran los grupos banqueros que se ahorrarían de pagar las enormes cantidades que adeudan al Servicio Nacional de Rentas Internas y sería el sector empresarial y banquero los más beneficiados con dicha ley, de esto no se supo mucho por los medios de comunicación masivos del Ecuador. Paralelo a esta ley, y sin mucho tiempo de distancia, el presidente democráticamente electo del Ecuador, el licenciado Lenín Moreno, anunciaba el aumento del precio a la gasolina super, esto con el fin de poder seguir manteniendo algunos de los subsidios estatales, lo que reclaman algunos sectores defensores de la clase media, es el por qué no se le exige a los emporios económicos pagar las deudas que el presidente tuvo a bien a condonarles, nunca se hizo un análisis serio en medios de comunicación, nunca se le dio una cobertura especial y profunda a estos temas, pero lo que si se trata a “profundidad” y en todos los medios masivos de comunicación es la migración excesiva de venezolanos en “busca de dólares” y que están dejando sin trabajo a los nacionales.
No quiero tampoco que se crea que este escrito busca minimizar el escabroso tema de Venezuela, pero lo que sí quiero acentuar es que en nuestros países hay problemas más grandes. En nuestros países siempre ha existido delincuencia común, siempre ha existido prostitución, siempre ha existido variedad en los precios de servicios en mano de obra de oficios como albañilería, carpintería, fontanería, mecánica, pintura de casas, pintura de carros, etcétera. No por la migración de venezolanos/as estas cosas están variando en índices ascendentes.
Insisto, varios gobiernos latinoamericanos están usando la desgracia del país vecino para no mostrar su lacaya "gestión" al servicio al servicio de aquellos/as poderosos/as que amasan riquezas que ni en diez vidas podrán gastar.
Nota: Nadie es ilegal, migrar es un derecho de todos/as.
