Para los exguerrilleros no ha sido nada fácil la vida civil. En gran parte por el débil cumplimiento de los acuerdos de paz por parte del gobierno y, sobretodo, por las dificultades con las que se enfrentan a la hora de meterse en programas educativos. Todos tenían ganas de estudiar, pero muy pocos han podido hacerlo.
Para suerte de muchos, hay varias instituciones educativas realmente comprometidas con el proceso de paz de Colombia, como por ejemplo el instituto INEM Francisco José Caldas de la ciudad de Popayán. En este colegio recibieron a todos los excombatientes que quisieran estudiar. No importó que no tuvieran plata o no supieran leer. Para todos hubo espacio. Y para gusto de todos los que hicieron parte de este proceso, los 52 exguerrilleros estudiantes de este año lectivo, recibieron sus diplomas orgullosos en una solemne ceremonia asistida por sus familiares, amigos y compañeros. Para ellos esto es un nuevo paso para la construcción de la paz a la que se mantienen irreductiblemente comprometidos.
