Nos permitimos denunciar el espionaje por parte de agentes externos desconocidos que se ha venido efectuando en contra del movimiento, el cual ha causado temor entre los integrantes y ambiente de zozobra, más si se tiene en cuenta el historial violento que ha tenido el país. El día 31 de mayo de 2017, aproximadamente a las 4 p.m., cuando se venía efectuando el cierre de la universidad por parte del sindicato de trabajadores oficiales de la universidad, fueron vistas 2 personas que tomaban fotos a los presentes en el proceso. Ahí me encontraba yo, otros compañeros e integrantes del sindicato anteriormente nombrado. Inmediatamente procedí a tomar fotos y sacar pruebas del hecho, corriendo con la mala suerte de ser visto por estos, quienes inmediatamente emprendieron la huida.
Eran dos hombres quienes tomaron fotos a los manifestantes dentro de la Universidad del Tolima, ubicada en Ibagué, el día 31 de mayo del 2017. Uno de ellos tenía un buso amarillo y pantaloneta negra, y el otro traía puesta una camisa roja y un pantalón blanco.
Más adelante, el 5 de junio de 2017 se presentó un evento en el edificio los OCOBOS, donde actualmente se lleva una protesta pacífica. Un hombre ingresó a la zona de acampar, sin identificarse y con un canguro en la mano, al parecer en donde portaba un arma. Este solo estaba observando, pero no tenía el permiso de ninguno de los integrantes del movimiento que estaban presentes. En el momento en el que salió fue perseguido por un compañero, quien confirmó que el hombre ingresó a una patrulla de la policía nacional.
Después de sucedida esta situación se dio aviso a los demás integrantes por medio de las redes, quedando al tanto todos de la identificación de este hombre. Con la imagen del hombre di con la casualidad de que en las horas de la tarde, a las 4 p.m. lo encontré al interior de la universidad. Proseguí a seguirlo y él salió a correr sin razón alguna, por eso saqué mi celular y le tomé fotos y vídeos al automóvil particular gris en que se transportaba, este era de placas IGY630.
El hombre que ingresó sin identificarse al edificio de los OCOBOS en la ciudad de Ibagué (Tolima) tenía una mochila en la mano en donde al parecer portaba un arma. Él estaba vestido de camisa verde y tenía un jean.
Cabe resaltar que este tipo de hechos ya habían ocurrido en ocasiones anteriores, pero que no habían sido denunciadas por la única razón de no provocar escándalo y miedo al interior de la universidad.
El presente informe se hace sin el fin de lanzar acusaciones directas a ninguna persona u/o institución, solamente con el fin de alertar a las autoridades, entes de derechos humanos, defensoría de pueblo y demás instituciones encargadas de garantizar una protección y de garantizar el derecho a la libre protesta.
SOLICITUD:
Teniendo en cuenta el artículo 23 de la Constitución Política de Colombia, hago la siguiente solicitud:
- Que se nos respete el derecho a la privacidad contemplado en el artículo 15 de la constitución política de Colombia, el buen nombre y la honra.
- Que no se sigan dando seguimientos ilegales e injustificados a los manifestantes que reclaman una mejor Universidad, ya que el artículo 37 de la Constitución Política de Colombia contempla el derecho a la reunión y a la manifestación.
- Hacemos notificación previa, para no ser víctimas de un falso positivo judicial. Ante los hechos anteriormente mencionados responsabilizamos de nuestra seguridad e integridad al estado colombiano y a la Policía Nacional por los seguimientos irregulares.
- Que se le envíe una alerta temprana a las directivas de la Universidad del Tolima, en especial a Omar Mejía, quien es el rector, para proteger nuestro derecho a la protesta.
