Las luchas en el mundo para obtener la igualdad entre pobres y ricos; mujeres y hombres; blanco, negros etc… ha llevado a los grupos de dichas causas a ganarse un lugar en la sociedad. Sin embargo, existe un sector que aunque en las épocas de campaña es muy nombrado por los candidatos; el tiempo restante es una población ignorada por el Gobierno Nacional "discapacitada".
El transitar en las calles nacionales para una persona que carece de las facilidades para movilizarse como cualquier otro individuo es un esfuerzo extremadamente arduo porque ninguna infraestructura cuenta con la normativa que ordena la ley. No obstante existen héroes que salen a abatir las circunstancias y los obstáculos que se cruzan en el camino (en los cuales me incluyo como heroína) no para auto alabarme, sino porque tengo una discapacidad física y por la que me movilizo con la ayuda de un caminador ortopédico.
Actualmente las instituciones de educación media básica y superior han abierto la puerta a jóvenes como yo que deseamos salir adelante por nuestros propios medios, teniendo como base nuestro conocimiento siendo este la herramienta para llevar a cabo la labor propuesta. Infortunadamente, el hecho de necesitar una herramienta técnica como una silla de ruedas o en mi caso, un caminador frena en ocasiones la entrada a una empresa para lograr desempeñarse como profesionales.
Otra dificultad que se presenta es que en las viviendas de interés social no están aptas para ser habitadas por personas con alguna limitación física, debido a que en la primera planta hay una sala comedor pequeña, un patio de ropas, un baño muy pequeño el cual no permite que una ayuda técnica entre allí, la cocina. En la segunda planta se encuentran 2 o 3 habitaciones que son tan pequeñas que no permiten la movilidad dentro de ellas. Y ni pensar en otro tipo de vivienda porque los inmuebles están entre las nubes.
Una persona en condición de discapacidad carece de una pequeña habilidad física, pero no de todas las características que lo identifican como ser humano hábil, productivo y creativo. Sobretodo creativo porque para sortear las dificultades que se presentan en este mundo hecho para individuos “normales”.
Uno de mis libros preferidos en Ensayo Sobre la Ceguera ilustra exactamente lo frágiles que podemos ser en un determinado momento. Además, desarrollamos la capacidad de descubrir la resiliencia, la fuerza necesaria para sobreponerse a los dolores físicos y del alma, siendo estos últimos los que quedan marcados con hierro caliente en nuestro ser.