Es evidente que la sociopatía está incrustada en el Estado colombiano: corrupción, matanzas, mentiras, narcotráfico, nepotismo, negligencia, encubrimientos, robos y prácticas vergonzosas estimuladas y protegidas desde las más altas esferas del gobierno colombiano.
La protesta de colombianos no es solamente por la reforma tributaria que perjudica enormemente al pueblo colombiano, sino por la corrupción tan campante y la matanza de colombianos a lo largo y ancho del territorio. Estamos ante una dictadura delincuencial que ha tomado al Estado colombiano para justificarla, cumplirla y continuar con sus atropellos en Colombia. Si los anteriores presidentes fueron criminales, considero que Iván Duque es un idiota útil que perdió su dignidad y rectitud para dirigir un país serio y democrático, además de que presuntamente fue elegido con la compra de votos debido a la Ñeñe Política, sus ideas inútiles en el gobierno han sido para obedecer a un dictador sociópata y enfermo de odio, dinero y corrupción como lo es Álvaro Uribe Vélez.
Duque se hizo elegir con un eslogan "menos mermelada y cero corrupción", pero estos son los flagelos que precisamente desangran a Colombia y hunden en la pobreza a todo un pueblo. Miles de colombianos en las calles obligaron al gobierno y tumbaron la reforma tributaria que nos “querían imponer”, hicieron renunciar al corrupto de Carrasquilla y ahora queremos la destitución de la ministra de las TIC, Karen Abudinen, quien por omisión o no, pagó 70.000 millones a un conjunto de empresas de dudosa procedencia aunadas con el nombre Unión Temporal Centros Poblados con el objetivo de instalar centros digitales para las escuelas más apartadas en los territorios de nuestro país y permitir que los niños y jóvenes puedan tener conectividad y acceso a la educación virtual. Esta ministra, quien no sabe ni en donde está parada, viene de cargo en cargo sin hacer nada, pasó por el ICBF, la Secretaría de Educación de Barranquilla y ahora al Ministerio de las TIC, haciendo mandados al clan de los Char, quienes tienen secuestrada con la más alta corrupción a Barranquilla.
Ninguna de las empresas que conforman la Unión Temporal Centros poblados cumple con las condiciones técnicas, financieras y de conocimientos para la licitación, ni siquiera experiencia en telecomunicaciones, sin embargo, le otorgaron el contrato. Se conoce que tres de las pólizas que presentó la empresa son falsas pero la ministra después que le desembolsa el dinero es que va a reconocerlo.
¿Qué pasó con el interventor y el grupo de abogados que vigilan los contratos?
Esta ministra afirmó en Canal Caracol que estaban poniendo la lupa a cada contrato y no existía riesgo alguno. Sin embargo, cuando se dan cuenta de que parte de la plata sale para otro país, que las pólizas son falsas y no hay ningunas instalaciones, entonces se destapa la corrupción.
Las empresas que conforman la Unión Temporal son: Novotic, con el NIT 9004858610; Icm S. A. S. con el NIT 8002310218; Intec de la Costa S. A. S. con NIT 8305021351 y Omega Building Constructora S. A. S. con NIT 9009901823.
Las tres últimas son constructoras de vías, ferrocarriles y obras civiles, pero nada tienen que ver con telecomunicaciones y conectividad. ¿Qué pasó ahí, ministra?
Además, Intec ya había sido denunciada por corrupción en el departamento de Bolívar.
En cuanto a Novotic, al parecer, no es la empresa que dice ser. Esta aparece registrada en la Cámara de Comercio de Barranquilla con el mismo NIT de Funtics para acreditar experiencia y ganarse la millonaria licitación con MinTIC, lo único que hicieron fue cambiar de razón social, pero en realidad Funtics ya había sido cuestionada por incumplir contratos.
La Contraloría ya había denunciado a Funtics por recibir pagos de servicio de conectividad por periodos de inactividad económica. Es decir, pagos por servicios no prestados: algunas gobernaciones le pagaron cuando los estudiantes estaban en vacaciones o recesos académicos. También denunció la doble conectividad, sobrecostos, “elefantes blancos virtuales”, o sea que se pagó por un software que nunca se utilizó, y la no totalidad de los megas que tenían que entregar Funtics, costándole al Sistema General de Regalías más de 10.000 millones de pesos.
¿Entonces, por qué la ministra Karen ocultó o desconoció todo esto?
¿Por qué contratar con empresas de dudosa procedencia?
Miremos el prontuario de la ministra Karen Abudinen. Esta señora ya había sido denunciada por un periodista, a quien le pidió un porcentaje del 40 % por adjudicarle un contrato. Asimismo, unos padres de familia del IED de Carrizal la denunciaron porque cuando era secretaria de Educación de Barranquilla en una de sus rendiciones de cuentas dijo que la IED de Carrizal se le habían construido 32 aulas con una inversión de 2.400 millones de pesos, algo que nunca pasó, pero la denuncia la engavetó el procurador del momento y los demás entes de control, y en represalia el colegio fue abandonado y algunos padres amenazados.
El problema es que Margarita Cabello, procuradora nacional que es alfil de la casa Char, va a investigar a la ministra, también cuota de la casa Char.
¿Esta mujer, sin ética y sin escrúpulos ficha del clan Char, es la que aspira a alcaldesa de Barranquilla…? Cuando en Barranquilla el 70 % de las familias viven en la pobreza y no hay inversión social sino en carreteras, centros comerciales, edificios, parques y puentes?
A Barranquilla la ha endeudado en un 65 % y parte de esa plata se la han embolsillado los Char y miembros del concejo, la otra parte la utilizan para comprar árboles y arreglar parques, como el billón de pesos que aprobó el concejo de Barranquilla para su arborización. ¿A cómo sale cada árbol?
Pero que la gran mayoría de su población vive del rebusque.
Barranquilleros nacimos libres. Es necesario eliminar del imaginario esa idea popular corrupta que dice: “los Char roban, pero hacen”.
No hacen sino para ellos, y la seguridad también es para ellos y, por el contrario, se han enriquecido a costa del trabajo de nosotros, y de aquellos títeres que utilizan y se prestan para sus apetitos voraces de corrupción, impuestos y normas injustas que han decretado. Presionan a sus trabajadores y los obligan a votar por quienes ellos decidan, para desde allá someterlos más, y votarlos sin ningún escrúpulo. Todo lo que tocan lo corrompen, así anda la Universidad del Atlántico, recuerden que así pasó con Uribe y todo el periodo criminal que vivimos y estamos viviendo. Barranquilleros, no le demos más poder y derroquémoslos en las próximas votaciones.
