Esperanza Gómez, el destape de una actriz porno

Esperanza Gómez, el destape de una actriz porno

A sus 36 años es toda una celebridad en el cine triple X. Un pasado tortuoso en el que la obligaban a bañarse con ropa interior, fue lo que más tarde orgásmicamente la desinhibió

Por:
enero 04, 2015
Esperanza Gómez, el destape de una actriz porno

Cuán difícil era imaginarse que aquella cándida niña que andaba por Pereira vestida hasta el cuello, la misma a quien le inculcaron la virginidad como principal valor de la mujer, esa a quien obligaban a bañarse con ropa interior porque la desnudez era pecado terminaría convertida en la máxima diva -no solo de Colombia sino de Latinoamérica- del entretenimiento para adultos. Muy interesante sería conocer la opinión de aquel fallecido padre que dejó de hablarle todo un año luego de haberla visto en el noticiero sobre una pasarela modelando lencería, aunque a lo mejor no le hubiera quedado más remedio que aceptarla orgullosamente como hizo la madre luego de comprobar la admiración expresada por la gente del común al verla caminar por las calles de Pereira.

Más difícil es imaginarse que esa femme fatale de gemidos guturales y orgasmos múltiples –según dice ella- ante la cámara fue iniciada en el sexo de forma violenta ajena a su voluntad lo que le desarrolló un trauma solamente superado con ayuda psicológica. La mayor desgracia que le puede pasar a una mujer en medio de su feminidad, a ella le ocurrió un 29 de mayo de 1994 a los 15 días de haber cumplido 15 años. Un amigo de la familia, mayor de 50 años, se encerró con ella en el cuarto de un almacén y solamente su hermana, a quien el hombre previamente había encerrado en otra habitación, pudo escuchar el dolor que causó en Esperanza la pérdida del que para ese entonces, era el valor más importante en una mujer.

No obstante la atracción por hacer cine erótico vino desde hace dos años antes de aquella desafortunada experiencia. Como es costumbre en las familias más arraigadas a la tradición conservadora colombiana, la mujer es criada para servir al hombre en todos los quehaceres domésticos. Un buen día la joven Esperanza se encontraba organizando la habitación de su hermano y mientras ordenaba la cama, debajo del colchón encontró una misteriosa revista cuyas páginas contenían algo que esta jovencita, quien no conocía cuerpo alguno más allá del propio, nunca antes había visto: hombres y mujeres desnudos tocándose en posiciones inusuales con rostros expresando algo que bien podría ser dolor. La muchachita quedó estupefacta ante las imágenes, sin embargo a ella no le parecían obscenas sino muy estéticas, algo parecido al arte y desde entonces soñó con alguna vez ser ella quien estuviera en esas posiciones.

Quienes han tenido la oportunidad de conocer personalmente a Esperanza Gómez luego de haber visto parte de su trabajo, cuentan que es difícil atreverse a mirarla a los ojos, sin embargo a la mujer poco le importaría saber que su interlocutor disfruta viéndola hacer lo que mejor sabe hacer. Sus gemidos extasiada en placer la han convertido en una de las actrices porno más exitosas del mundo y aunque no puede hablar de cifras -porque su contrato así se lo impide- dice ser la actriz porno mejor pagada del mundo en este momento.

 - Esperanza Gómez, el destape de una actriz porno

Aquí en sus inicios como modelo. En el año 2000 fue Chica Águila.

Ella sabe muy bien qué es lo que le gusta a los hombres, no en vano su apetito sexual es más parecido al de estos que al de su género. También es cierto que los entiende muy bien pues al igual que ellos admira el cuerpo femenino junto a sus formas y su estética, puede excitarse con otra mujer disfrutando por igual las escenas que le ha tocado hacer con estas. “Las mujeres son como una entradita pero los hombres son el plato fuerte”.

Es feminista por excelencia y aunque respeta el trabajo del mundialmente famoso Nacho Vidal no le gusta lo que este hace en sus vídeos pues cree que rebaja a la mujer, lo cual va en contravía a lo que ella busca lograr por medio de su carrera, es decir reafirmar el poder de la mujer como generadora dominante de placer aun por encima del hombre.

En cuanto a su nivel actoral cuando está vestida hay que decir que este es verdaderamente pobre, quizá sea porque en sus producciones esto tampoco importa como sí importa la situación que se desata cuando la ropa cae al piso. Sus más fervientes detractores la critican bajo el argumento de que los gritos, alaracas y demás perendengues que realiza al ser penetrada son tan irreales como sus múltiples orgasmos, lo cual ella niega tajantemente. En todo caso, finja o no finja, Esperanza Gómez tiene auténtico talento para lo que hace, por algo es que tras su primera película en 2009 ascendió al puesto 62 de las actrices porno más deseadas en el mundo, logrando así en seis meses algo que otras logran en 4 años.

Rechazada en su primer casting por tímida, empezó a practicar juiciosamente con su esposo recreando escenas de películas porno en su intimidad quien lejos de sentirse avergonzado por el trabajo de Esperanza se enorgullece de que esta sea su compañera de vida y de mantener lo que ambos han denominado una relación abierta “Es que la infidelidad es si lo hace sin decirme nada, pero si me cuenta no hay problema” anota ella, como también dice que en algunos momentos en rodaje cierra los ojos y piensa en él para excitarse aún más.

En el país del Sagrado Corazón todos sabemos quién es Esperanza Gómez pero lo extraño es que nadie ve sus películas. No obstante ella sabe que de lo que dice la gente no se vive, por eso no tiene miedo alguno respecto a la forma en que sea percibida. Aunque aquella frase de cajón que hace referencia a lo irrelevante de las opiniones es ampliamente usada, son muy pocas personas las que verdaderamente la aplican en su vida como lo hace Esperanza. Ciertamente ella tuvo un sueño y pertenece a esa extinta raza de seres humanos que se atreven a perseguirlos hasta realizarlos “Es que eso que sueñan todas las niñas pequeñas del príncipe azul y todo eso, a mí se me cumplió con lo que vivo hoy día”.

De aquella niña cándida y virginal aún quedan mucho, su timidez por fuera de las cámaras es quizá lo más recurrente de esa primera etapa de la vida. Aunque a la estrella porno no le incomoda ser vista ejerciendo su profesión, si le hace sonrojar el verse ella misma haciéndolo razón por la cual cuando su esposo la recibe con una de sus películas ella huye despavorida ante la vergüenza que le producen sus gemidos en pantalla. Igualmente no es muy dada a la rumba y prefiere quedarse en casa cocinando, cuidando su jardín o consintiendo a sus mascotas.

-@EnriqueCart

Sigue a Las2orillas.co en Google News
-.
0
Así se creó la tradicional San Fermín, una de las panaderías más antiguas de Chapinero

Así se creó la tradicional San Fermín, una de las panaderías más antiguas de Chapinero

Chingue, cuchuco y otras palabras muiscas que aún usan los colombianos

Chingue, cuchuco y otras palabras muiscas que aún usan los colombianos

Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus
--Publicidad--