La carrera por la elección del nuevo Procurador General, que según el presidente del Senado, Mauricio Lizcano, se realizará la primera semana de noviembre, entró a la recta final y con ello llegan las estrategias de los candidatos en juego: Fernando Carrillo y María Mercedes López, los dos más opcionados. En las redes sociales y a través de anónimos circuló una versión según el cual la candidata nominada por el presidente Santos estaría inhabilitada para ocupar el cargo. Se dice que haber ocupado el cargo de Magistrada de la Judicatura le impediría ocupar la Procuraduría General. La exmagistrada buscó un blindaje y consiguió un concepto bastante significativo: el del abogado especialista en derecho Público, Mario Roberto Molano López, director de derecho Público de la Universidad Javeriana, alma mater del exembajador Carrillo. El jurista Molano López es una de las voces más respetadas en esa materia y su concepto, aunque es suscrito a título personal, tiene un significado especial ya que proviene de un respetado profesor javeriano, la misma universidad en la que se graduó Fernando Carillo y de la que ha sido profesor vinculado permanentemente.
Los respaldos en la recta final parecen estar cantados: El Partido Liberal tiene sus votos divididos entre Fernando Carrillo y el exfiscal Jorge Perdomo, mientras Conservadores, Cambio Radical y otro un sector de La U, apoyarían a María Mercedes López. Las bancadas del Centro Democrático, el Polo y la Alianza Verde tendrán la última palabra.