Conocidos los acuerdos sindicales entre el Gobierno nacional y Fecode- CUT es increíble que el gremio de los docentes del Estado se opongan al mérito. Según cifras de la Universidad Javeriana hay todavía en el estado más de 60.000 docentes provisionales de un total aproximado de 300.000.
Históricamente los sectores sindicales tradicionales se han opuesto de diversas maneras a los concursos de carrera administrativa, y para ello han diseñado distintas estrategias en lo corrido de la historia moderna de la carrera.
Iniciando su vigencia intentaron oponerse con varios actos legislativos y leyes que les otorgaban privilegios a los provisionales, bien para no concursar, o quedar inscritos automáticamente en carrera, y posteriormente ante el fallido intento, con base a negociaciones sindicales y, producto de tutelas individuales de la Corte Constitucional se crearon los retenes sociales.
Entretanto, estos funcionarios provisionales han sido objeto de manipulación política y sindical.
Los docentes han corrido la misma historia, y a regañadientes han tenido que aceptar los concursos de carrera para obtener la estabilidad soñada.
Estos han sido reglamentados legalmente y han avanzado varios concursos permitiendo el ingreso meritocrático de la mayoría. No obstante, queda un número significativo de provisionales (60.000) objeto de las mismas prácticas y manipulaciones.
El acuerdo sindical logrado revive esas excepciones del retén social, muchas justas por demás, por el tema de la dignidad humana, pero lo que de fondo están buscando estas organizaciones sindicales con el aval del nuevo gobierno es continuar con la provisionalidad de los que pierdan los concursos.
Y para garantizar que así sea, además de lo obtenido, le han agregado una nueva causa para no retirar al que pierda el concurso, y que es contrario a lo establecido ya constitucionalmente, el no retiro de quien tenga fuero de directivo sindical.
Es decir que se busca la utilización del fuero sindical para evitar el retiro en caso de que no supere las pruebas. Un abuso del derecho de asociación y de la negociación sindical, con intereses claramente corporativos y políticos.
Lamentable que eso pase en el sector educativo llamado a dar ejemplo de cumplimiento y pedagogía de la constitución y la meritocracia, que no es otra cosa que el cumplimiento de un derecho universal de la igualdad de oportunidades.