Es hora de elegir buenos gobernantes

Es hora de elegir buenos gobernantes

"El ejercicio del poder es para servir, no para servirse de él. Poder, decencia y humildad no son incompatibles"

Por: Omar Flórez Vélez
septiembre 30, 2019
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Es hora de elegir buenos gobernantes
Foto: Leonel Cordero / Las2orillas

El 27 de octubre elegiremos gobernantes en las regionales y municipios que regirán nuestros destinos en los próximos 4 años. Excelente oportunidad para oxigenar la democracia local y regional, hoy víctima de los carteles de la corrupción y la criminalidad. Las elecciones sirven para premiar o castigar a dirigentes y partidos que han engañado al pueblo y que se han aliado a perversas causas en detrimento del progreso de la gente.

Asistamos a las urnas con entusiasmo y libertad a respaldar con nuestro voto la propuesta y candidato/a que más convenga a la comunidad. Esta coyuntura sirve para dar un positivo mensaje al mundo: respeto por la democracia, al pluralismo ideológico y la solución civilizada de nuestras comprensibles discrepancias.

La voluntad soberana del pueblo expresada a través del voto libre, dentro de un proceso electoral transparente y pleno de garantías debe ser acatada y respetada. Su fallo es inapelable. Nadie debe sentirse derrotado.

Tenemos a nuestra consideración múltiples propuestas que interpretan la compleja realidad de nuestras comunidades. Corresponde a los candidatos adelantar una campaña respetuosa, noble y civilizada con énfasis en propuestas viables, para que sean merecedores de la gratitud ciudadana. La experiencia señala que quien acude a la mentira y a la trampa, si es elegido así será su gobierno.

Los nuevos gobernantes han de tener en cuenta que nuestra Constitución advierte que simbolizan la unidad y al jurar el cumplimiento de la Constitución y de las leyes, se obligan a garantizar los derechos y libertades de todos los ciudadanos, sin excepción alguna, tanto para quienes hayan votado por ellos, como por quienes no, votaron en blanco o se abstuvieron. Han de entender que debe construirse sobre lo construido por sus antecesores, no parten de cero.

Los nuevos gobernantes han de significar tranquilidad, seguridad, progreso; sería muy preocupante lo contrario: amenaza e inseguridad. Para el éxito de su difícil trabajo necesitan tender puentes hacia un escenario que facilite los indispensables consensos para su gobernabilidad y, desde luego, estimular la urgente reconciliación ciudadana y la colaboración del inmenso talento existente en nuestra población.

Aspiramos a sentirnos orgullosos y agradecidos de nuestros gobernantes, cuya solvencia ética, compromiso y liderazgo sirvan de ejemplo. El ejercicio del poder es para servir, no para servirse de él. Poder, decencia y humildad no son incompatibles.

Nuestra responsabilidad no se agota con la elección de los gobernantes, nos corresponde colaborar desprovistos de prejuicios y resentimientos, caminemos hacia el mismo destino que permita mejorar la calidad de vida de la población, la convivencia ciudadana, el crecimiento de la economía, el respeto a la dignidad humana, la derrota a la criminalidad y la corrupción.

Atrás deben quedar la improductiva polarización que ha fragmentado irracionalmente el ánimo y el talento de los ciudadanos. Los nuevos gobernantes, diputados y concejales tienen el privilegio y la enorme tarea de trabajar para corregir errores e intentar innovaciones sociales que permitan solucionar numerosos problemas. Del pasado reciente quedan muchas lecciones, entre otras: La mentira, el odio, el fanatismo, la exclusión social, la violencia, la corrupción, la politiquería… generan violencia, pobreza y atraso. Deslegitimar u obstaculizar el mandato de los nuevos gobernantes sería una actitud irresponsable, mezquina y suicida. ¡El fracaso del gobernante significa fracaso de la comunidad por cuatro años!

Conviene tener en cuenta que el buen ciudadano vota responsablemente. No se abstiene. Nuestra Constitución, en el artículo 95, señala: “Son deberes de los ciudadanos... Participar en la vida política, cívica y comunitaria del país”.

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