“Tienes que sorprenderla, Marlon, no quiero actuaciones, quiero rodarla humillada de verdad, quiero la reacción de la niña ultrajada, quiero presentarla completamente degradada, totalmente pisoteada, quiero que sienta la auténtica rabia de una tierna e inocente niña en ese momento tan impúdico”.
En esos términos, pudo Bertolucci haberle dicho a Brando, cómo debía violar a una candorosa e inexperta virgen ante las cámaras, para que la escena quedara eternamente como testimonio de otro crimen más en contra de una mujer indefensa.
“Usarás la mantequilla como lubricante, porque quiero que esta escena sea tan real, que se convierta en un clásico de la historia del cine”, es posible que así haya continuado este director, que ya no se puede admirar sino condenar y repudiar.
“Menos mal que Marlon no tiene muchas reticencias”, debió pensar, y hasta es posible que haya agregado con sonrisa socarrona: “Te la escogí virgen para darle mucho mayor realismo a la escena”.
“Te la escogí virgen
para darle mucho mayor realismo a la escena”
“¡Esto tiene que ser completamente libre, porque así es el arte!” –pudo haber rematado emocionado.
¿Que la idea se le ocurrió “casualmente” por la mañana antes de filmar la escena? Ese cuento no se lo traga ni la mamá de Bertolucci, hasta debió haber escogido intencionalmente a una joven virgen, mientras destilaba lascivia en su mente desde que concibió la famosa escena, para lo que necesitaba otro libidinoso como Brando.
Tiene la desfachatez de reconocerlo públicamente 41 años después, diciendo que “se siente culpable pero no arrepentido”, y se justifica diciendo que “para obtener algo muy bueno en una película, hay que ser completamente libre, y el no quería que María actuara su humillación y su rabia, quería que la sintiera de verdad”.
Tiene la desfachatez de reconocerlo públicamente 41 años después,
diciendo que “se siente culpable pero no arrepentido”
Esto es un acto premeditado entre dos hombres experimentados y en posición de superioridad sobre una víctima en posición de indefensión; nos referimos a nadie menos que al director del filme y al actor más famoso del momento. La víctima, una actriz muy joven con ganas de triunfar, que estaba en clara situación de indefensión frente a estos dos monstruos del cine, perversos, aprovechando la situación para realizar, lo que ambos estimaban sería una referencia obligada en la historia del cine.
Sin ser penalista, pienso que se cometió un delito contra la integridad sexual de una joven e indefensa virgen, que podría estar enmarcado dentro de las conductas descritas en los artículos 207 y 211 del Código Penal colombiano, que obviamente no les aplica a ninguno de los protagonistas.
El 207 dice: “El que realice acceso carnal con persona a la cual haya puesto en incapacidad de resistir… …o dar su consentimiento… …Si se ejecuta acto sexual diverso del acceso carnal, la pena será de tres a seis años”.
El 211 se refiere a que las penas para los delitos descritos en los artículos anteriores, se aumentarán cuando los victimarios se confabulen para lograrlo (precisamente lo que hicieron Marlon y Bertolucci), y además, “el responsable tuviere cualquier carácter, posición o cargo que le dé particular autoridad sobre la víctima o la impulse a depositar en él su confianza”.
Bertolucci como director, era el jefe de María y un cineasta reconocido, y Brando era “el actor” del momento, ¿qué más quieren?
Pregunto… ¿Es arte filmar la violación de una virgen indefensa? La vida de María Schneider transcurrió después en un infierno entre las drogas y reclusiones por enfermedades mentales, ¿pudo esto haber incidido?
Creo que el Derecho de la Posmodernidad permite perfectamente procesar con éxito a Bertolucci, ojalá haya un grupo de abogados penalistas que se le midan, porque se lanzarían al estrellato logrando Justicia.
¿O es que creen que no se debe hacer nada porque según Almodóvar: "Acusar de violador a Marlon Brando y a Bernardo Bertolucci es algo que no soluciona nada"? Claro que resuelve, se resarce a una sociedad ofendida, sería cómo decir que el feminicida Uribe Noguera no se debe procesar porque eso no devuelve la vida de Yuliana.
Los ofendidos somos todos los ciudadanos y queremos Justicia.