Bernardo Elías es el tercer senador más votado después de Jorge Robledo y su copartidario y amigo Musa Besaile. En las últimas elecciones el Ñoño sacó 140.143 votos y fue una de las fichas claves para la reelección de Juan Manuel Santos, pues puso a su disposición toda la maquinaria en la costa con la que derrotó a Óscar Iván Zuluaga. Hasta hace muy poco Elías era un senador de bajo perfil, a pesar de todo su poderío político, sin embargo, su nombre quedó bajo la lupa en febrero de este año cuando la Fiscalía pidió ante la Corte Suprema de Justicia que el senador fuera investigado por los sobornos que dio la empresa brasileña Odebrecht para adjudicarse la Ruta del Sol II.
Bernardo Elías creció en medio de la política liberal de Córdoba, con el referente de su tío Jorge Ramón Elías Náder quien terminó detenido e inhabilitado por el Proceso 8000 y su participación en la campaña que llevó a Ernesto Samper a la Presidencia con dineros del Cartel de Cali. Se estrenó en el Congreso muy joven, a los 29 años en el 2006. Fue elegido representante a la cámara con 40.000 votos, como fórmula de la senadora Zulema Jattin, heredera del grupo político de su papá Francisco Jattin e investigada desde 2007 por sus presuntos vínculos con paramilitares de Sucre y Córdoba. En 2010 saltó al senado, con74.247 votos. Sin embargo, su vertiginoso ascenso en la política tiene varios lunares.
Actualmente, el Ñoño Elías está imputado por cinco delitos graves relacionados con Odebrecht: lavado de activos, concierto para delinquir, cohecho propio, tráfico de influencias e interés indebido en la celebración de contratos. Otto Bula, el enlace de la empresa brasileña en Colombia y quien prendió el ventilador por este caso de corrupción, aseguró que a Elías le tocaron $32.000 millones por las gestiones de los contratos, así como una buena tajada de la mermelada de la Casa Nariño. Su campaña del 2014 fue un derroche de recursos, con cierre de campaña al son de Silvestre Dangond y la evidencia de millones rodando en Córdoba.
"Compadre Ñoño Elías, yo porque no me meto en política [...] pero mi gusto fuera votar por usted; por la ñoñomanía. Apoya la ñoñomanía 100%. Mi hermano Ñoño Elías, abrazo compadre..."
En total, Bernardo El Ñoño Elías recibió $ 90.000 millones para gestionarlos en diferentes obras. Uno de los convenios adelantados por el senador cordobés ejecutados en 2015, se firmó entre el municipio de Sahagún y el FONADE, dirigido en su momento por su amigo Alfredo Bula Dumar quien estuvo un año en el cargo hasta julio del 2016, a quien sucedió Alfonso Aduén Ángel, quien llegó por conducto del suegro del Ñoño, Erick Morris, y permaneció en el cargo también solo otro año, hasta agosto de este año. La Contraloría Nacional reportó un hallazgo fiscal por $3.000 millones. Conocedor de la importancia del FONADE para las inversiones regionales, este cargo fue uno de los acuerdos a los que llegó el Ñoño con el Presidente Santos como producto de sus resultados electorales en Córdoba, fundamentales para su reelección.
En 2015 se firmó y ejecutó entre la alcaldía de Sahagún y el FONADE un contrato por $51.767 millones para hacer andenes y parques, renovar la malla vial, construir una plaza de mercado pública, una terminal de transportes con capacidad para 500.000 personas y una ciclorruta de 8 kilómetros. El Uno de los contratistas de esas obras (la Unión Temporal Andenes Centenario) tiene como uno de sus integrantes una firma llamada Construccapital S.A.S., que en 2011 tuvo de socio a Bernardo Elías Náder (papá del senador Elías).
La familia del Ñoño operaba como una maquinita bien engrasada en política y negocios. El alcalde de Sahagún para el momento era Carlos Elías, primo del Ñoño, y fue quien adelantó las obras para el municipio; y su otro primo, Julio Feris Elías, dirige la Liga Ñ, creada por la Ñoñomanía. Feris Elías firmó dos contratos por 40 millones de pesos el 21 de septiembre de 2015 con la Gobernación de Córdoba, encabezada en ese momento por Alejandro Lyons que está siendo investigado en Estados Unidos por los sobornos entregados al capturado Luis Gustavo Moreno.
Según investigación de Las2orillas en el artículo “La mermelada parlamentaria de puestos y contratos” a Ñoño Elías le entregaron varios contratos y puestos en entidades públicas:
Cargos entregados: 5
Monto entregado vías: 14.000.000.000
Monto entregado obras: 52.000.000.000
Distribución por entidad: 24.000.000.000
El Ñoño escogió con cuidado los cargos que le pediría al Presidente Santos para que resultaran afines a sus propósitos electorales: nombramientos para lograr contratos.
Era tal su poder en la Casa de Nariño que logró, a pesar de la oposición del Director d Planeación Simón Gaviria, poner al director del FONADE, entidad que maneja un presupuesto anual de $ 3 billones y es la encargada de gestionar los dineros que se invierten en las regiones. En marzo de 2015, Alfredo Bula, cercano a los Nule y con quienes trabajó en asociación para la concesión de la vía Bogotá-Girardot en 2004, asumió la dirección del FONADE como cuota política de Bernardo Elías y después de un año fue reemplazado por otra cuota suya: Alfonso Aduén, cuyo retiro después de un año coincidió cronológicamente con el escándalo de Odebrecht, con lo cual el Ñoño perdió su cuota, igual que su curul.
Logró sostener otro puesto clave: la dirección regional del ICBF, funcionario que también define la Casa de Nariño. El escogido fue Eduardo José Tous, también conocido como ‘Joche’ Tous, de las entrañas del Ñoño. Permaneció en el cargo, a pesar de los permanentes cuestionamientos, desde 2007 hasta febrero de 2013, todo el primer gobierno Santos y se retiró para ser fórmula al Congreso con su protector. Cuando Cristina Plazas salió de la dirección del ICBF, aseguró que el Ñoño había saqueado la institución durante 14 años. Tous y Elías consolidaron su poder desde la entidad. Por ejemplo, entregaron a dedo los contratos de alimentación en el departamento a través de dos personas: Mirta Algarín, que recibió contratos por más de 20.000 millones de pesos entre 2010 y 2015 como representante legal de la Cooperativa de Servicios de Madres Comunitarias de Cereté, y Leda Guerrero, quien pasó de ser la secretaria del congresista Salomón Nader a una de las mayores activistas políticas de Bernardo Elías como directora de la Fundación Unidos por Colombia y la Cooperativa Multiactiva CNI, que ha firmado millonarios contratos con el ICBF en Córdoba.
Lo cierto es que la máquina de producir votos llegó a su mayor eficacia en la campaña electoral del 2014, cuando Bernardo Elías era uno de los congresistas mimados de Santos a quien invitaba en el avión presidencial y visitaba su casa en Sahagún. En 4 años de mermelada y millonarios recursos, ahora se sabe, buena parte proveniente de las coimas de Odebrecht invadió a Córdoba de la Ñoñomanía y logró duplicar la votación, al pasar de 70.000 a más de 140.000 votos, convirtiéndose en el tercer elector del senado después del senador Jorge Enrique Robledo y su coterráneo Musa Besaile. Los días de gloria ya forman parte de su pasado y les esperan largos días en la cárcel sino se decide a colaborar con la justicia.