Los ultraderechistas, que no son pocos, irán detrás de él. No les importa que su gobierno haya sido el mas corrupto de historia con mas de una docena de sus funcionarios investigados o encarcelados. No les importa que haya comprado su reelección o que haya chuzado los teléfonoso y escuchado las conversaciones de la oposición, de periodistas y de magistrados que no compartían su opinión. No les importa que haya avalado el asesinato de jóvenes campesinos por parte del ejército para presentarlos como guerrilleros dados de baja en combate ni que haya regalado la plata a los hacendados mas ricos de Colombia sin contraprestación alguna, usando el programa de subsidios al campo llamado Agro Ingreso Seguro.
A los ultraderechistas seguidores del senador redentor, no les importa las probadas vinculaciones que ha tenido con el paramilitarismo y la parapolítica. Ellos piensan que el robo a la Dirección Nacional de Estupefacientes durante su gobierno es una vil calumnia y que el Frente Cacica la Gaitana de las FARC sí existió y por lo tanto creen que es una mentira que su asesor de paz se lo haya inventado para mostrar como logro suyo el haber logrado su desmovilización, lo cual resultó ser un gran montaje.
Esos y muchos otros hechos están en el pasado cercano y los ultraderechistas prefieren no recordarlos o simplemente negarlos. Pero algunos otros mas recientes como que el hermano de su jefe fue privado de la libertad por haber creado y liderado el grupo paramilitar de los doce apóstoles, responsable varias muertes y prácticas crueles e inhumanas en el municipio de Yarumal; o que su viceministro de transporte recibió 6,5 millones de dólares de la empresa brasileña Odebrecht como soborno para que le ayudara a obtener el jugosísimo contrato de la autopista llamada Ruta del Sol, no los pueden olvidar y prefieren taparlos marchando contra la corrupción que ellos mismos han protagonizado.
Entiendo la mente de un uribista. Les encanta la mano dura aunque sea contra ellos. Los empresarios, hacendados, banqueros y políticos que recibieron sus favores, encuentran razón para seguirlo. Pero el resto simplemente simplemente viven enceguecidos por su mano dura sin analizar las verdades verdaderas que lo inculpan y demuestran su verdadera naturaleza.
La mano dura lo explica todo. Es difícil sacarla de la mente de las masas y evitar que se le venere. Son muchos siglos acumulados de historia de reyes, virreyes, caudillos y dictadores que con armas, sangre y fuego han llegado y sostenido su poder. El pueblo no está preparado para mayores libertades. Le gusta la protección del ser mesiánico que disponga de todo (hasta de sus libertades) y le permita un poco de seguridad sin mayores responsabilidades porque él se encarga de todo. Simplemente el pueblo no quiere pensar, así que prefiere un caudillo que piense por él. El pueblo quiere pagar con su sometimiento la libertad de no pensar que desea.
Por eso no les importa lo que haya detrás del caudillo, mientras él piense por ellos, los libera de la pesada carga de pensar. y como no quieren pensar, aceptan todas sus mentiras como verdades y creen que viven felices. Por eso irán detrás de él en la marcha. Es un sacrificio pequeño por un hombre que "hace todo por ellos!"
