En medio de la polémica generada tras el timonazo a la derecha del proceso de vinculación de capital privado para salvar de una vez por todas a la moribunda Electricaribe, ha pasado desapercibido un dato relevante: el potencial de mercado de energía solar fotovoltaica que el Caribe representa para un operador de red que pretenda quedarse con el negocio en la región de mayor radiación solar de Colombia.
Potencial de mercado y eficiencia económica
Se trata nada menos que del diamante de la corona de la energía del presente y del futuro, un gigantesco mercado cautivo de 2.6 millones de clientes (auto generadores y proveedores a gran escala) de energía renovable en 7 departamentos del Caribe, a partir de FNCER, especialmente la solar fotovoltaica, dada su eficiencia económica, rápida instalación y expansión. En otras palabras, el vientre preñado de Electricaribe para un futuro sostenible de la región desde el punto de vista social, económico y ambiental.
La intervenida Electricaribe cuenta con una sustanciosa base de datos de clientes —regulados y no regulados— que a mediano y largo plazo representarán el mayor atractivo financiero para los potenciales inversionistas operadores de red con visión de diversificación de la matriz energética, una vez las nuevas inversiones faciliten un acople tecnológico confiable para la masificación de la energía renovable en la Costa Atlántica. El caso de Florida Power & Light de los EE.UU. es un buen ejemplo de diversificación de un monopolio bien regulado que dio el salto a la energía solar.
Adicionalmente, al minimizar la costosa y antieconómica cadena de valor que lleva energía eléctrica hasta el último rincón del Caribe (generación + transmisión + distribución + restricciones + pérdidas + comercialización), Electricaribe podrá diversificar su matriz energética y acceder a mejores precios en el mercado mayorista de energía, pudiendo obtener importantes ahorros monetarios de hasta un 50% por concepto de compras de energía solar en bloque, con o sin almacenamiento, vía subastas de largo plazo y convocatorias. Un paso en la línea correcta hacia la diversificación de la canasta energética y la matriz de riesgo del negocio. México, Chile y Brasil han demostrado que sí se puede.
El sol, el mejor aliado
El activo energético más estratégico no serán los cables y hierros envejecidos de la red de Electricaribe sino el sol, un combustible que cuesta $0 por mandato de la naturaleza. El privilegiado mapa de radiación solar de la región Caribe registra una oscilación entre 4.5 y 6.0 Kwh/M2/día, que contrasta con territorios de la región andina donde la radiación solar promedio durante los 365 días del año oscila entre 3.0 y 4.5 Kwh/M2/día, diferencia que impacta directamente la productividad de los paneles solares.
Esta fortaleza proveniente de la naturaleza permite que la tecnología solar fotovoltaica (On Grid) pueda penetrar hasta un 50% la matriz energética de cientos de miles hogares y negocios, con cada día mas bajos costos de inversión, mantenimiento, y atractivos financieros, durante los 30 años de vida útil de una planta solar FV.
Expansión renovable
Contar con una fuente fotovoltaica de rápida instalación y expansión le cae como anillo al dedo al Plan de Expansión de Referencia Generación – Transmisión 2017 – 2031, elaborado recientemente por la UPME, en el cual se identifica que el país necesitará 2.886 MW nuevos de renovables no convencionales en un escenario en el que se recupere Hidroituango o 4.312 MW nuevos de renovables no convencionales en el escenario de no recuperación.
Así mismo, indica la UPME, que para el escenario de expansión de generación más robusto desde el punto de vista de cumplimiento de criterios de confiabilidad, reducción de emisiones y costo del servicio, la distribución de la matriz incluye una participación aproximada del 25% para fuentes renovables no convencionales. El plato está servido para la energía solar.
Es el momento de la energía solar
Como lo señalábamos en artículo anterior, ya no hay excusas para seguir sometidos a los abusos de los oligopolios que manejan de manera folclórica la energía proveniente de combustibles fósiles contaminantes, tras el Acuerdo de París COP21 sobre cambio climático. Es el momento de las fuentes renovables con tecnologías líderes como la solar fotovoltaica, la estrella de las renovables, para que operen de manera sincronizada con la red local, regional y nacional.
Clientes que de alguna manera, más temprano que tarde, podrán ordenar la instalación de plantas solares FV en su residencia o negocio, mediante la suscripción de contratos de crédito ligados a su facturación mensual de energía eléctrica, u otros instrumentos de financiación en condiciones preferenciales que den impulso a la masificación de energías renovables.
¿Habrá un diamante de la corona más atractivo a mediano y largo plazo para un operador de red-comercializador interesado en este negocio?
