Tras el triunfo de Nairo Quintana en la Vuelta a España, Telefónica organizó una rueda de prensa en su búnker de Madrid para anunciar la renovación del contrato del ciclista de Boyacá hasta el 2019.
Durante el encuentro con los medios, Quintana fue preguntando acerca de su regreso a Colombia, pero éste manifestó que por compromisos con su equipo Movistar le era imposible viajar.
Lo que más llamó la atención de la respuesta fueron las miradas cómplices por parte del ciclista y el director de Movistar Team, Eusebio Unzué, quien ya sabía de antemano que el deportista estaba mintiendo.
Nairo, su esposa e hija se aparecieron en el mostrador de Avianca de Barajas a las 7:00 de la mañana de ayer martes, sin que nadie lo supiera, y presentaron sus pasajes en clase económica. La tripulación del avión, al notar su presencia, no dudó en ofrecerle al “rey de la Vuelta a España” asientos en primera clase.
Al arribar a la capital de Colombia en horas de la tarde, Nairo fue recibido como un héroe por los trabajadores del aeródromo, y luego raudo y veloz, embarcó una camioneta para conducirlo a la casa de sus padres que viven en el departamento de Boyacá.
Más tarde aparecía en sus redes sociales el motivo de su mentira: “Viaje sorpresa para ver a mi familia, motor de mi vida. Pido un espacio con ellos. Y pronto celebraremos”.
