Como seres humanos, podemos reflexionar sobre la vida, en el sentido, que nosotros NO decidimos, NI fuimos los responsables de nuestra existencia; nuestros padres, no los escogimos; nuestro contexto económico, tampoco lo seleccionamos. Desde la percepción religiosa, de igual forma no escogimos asumir el pecado y tener, por fe, la esperanza de la inmortalidad.
Desde la visión psicológica las etapas de la vida están clasificadas en período prenatal (in útero y nacimiento), infancia (>0, y <=5 años), niñez (>5 y <=11 años), Adolescencia (>11 y <=18 años), Juventud (>18 y <=26 años), Adultez (>26 y <=60 años), y ancianidad (>60 y más años).
En cada una de estas etapas, no estamos blindados de la muerte; los trastornos genéticos, accidentes (discapacidades) y las enfermedades; por otro lado, no tenemos las habilidades, competencias, información y condiciones sociales suficientes para resolver los problemas que se encuentran en los contornos, escenarios o contextos, familiares, educativos, laborales, sociales, políticos, comunitarios, ambientales.
Por lo anterior y de manera lógica podemos deducir, que una vida de esperanza, felicidad, individual, grupal, como social, oscila entre la dependencia, independencia e interdependencia, en las tomas de decisiones, acciones y resultados.
Las malas decisiones y sus acciones de hecho tienen un impacto psicológico, emocional, social (relaciones interpersonales), económico, político, etc.
Viendo al hombre como una cosa, objeto, se podría afirmar, que, con la educación, conocimientos y competencias, se valoriza. Con la edad se devalúa (baja demanda, no se requiere). Pero visto como un objeto económico, se le puede calificar que se deprecia, por su “desgaste de uso” (obsolescencia); claro está, viéndolo como un bien material y negando su capacidad intelectual, cognoscitiva y emocional.
En Colombia la edad mínima para trabajar es de 15 años. Los adolescentes no se pueden desempeñar en trabajos considerados peligrosos y en aquellos que lo pueden hacer requieren de una autorización del inspector de trabajo y autorización de sus padres. Por otro lado, de acuerdo con la ley 1821 del 30 de diciembre de 2016 se puede trabajar hasta los 70 años, si se encuentra empleado y cumple funciones públicas.
En el ámbito laboral, la edad puede ser un factor importante para contratar y depende de cada organización la cual tiene en cuenta el cargo o puesto en oferta; su nivel administrativo, en cuanto toma de decisiones; las funciones del cargo, que direccionan el perfilamiento del empleado; experiencia laboral, conocimientos, aptitudes y actitudes adquiridas, como el lugar donde se obtuvieron.
En la revista “Cambio” en línea (internet) del 28 de abril de 2023, en el artículo titulado “Viva la Vejez”, Daniel Samper Pizano, expresa que a futuro existirán más jubilados, que jóvenes; bueno si las políticas (superintendencia financiera) del sistema general de pensiones lo permite. Se dice que hoy en día, hay un (1) jubilado por cada cuatro (4) ancianos.
Además, expresa en su artículo y complementa lo arriba expuesto, que dejar a estos ancianos en la inactividad es peor que la vejez. Aconseja adelantar, deduzco yo, cursos, seminarios, talleres para que psicológicamente (desensibilización sistemática) se preparen para su obsolescencia programada. Que hagan conciencia para entender que ya no van a servir para nada, que son una basura humana y que deben ser depositados en los ancianatos. Quiero que me entiendan, que no hablo peyorativamente de estas instituciones, pues pueden jugar un papel importante en la dignificación, valorización y utilización de sus experiencias y conocimientos.
Continuando e interpretando, dice que a estos ancianos se les debe ocupar en actividades recreativas, juegos de entrenamiento (gimnasia, mentales), yoga, natación, caminar, etc. Para mí, no es ocuparlos en actividades sociales. El objetivo es que continue trabajando hasta que él tome la decisión de retiro o su condición psicológica, física o fisiológica se lo impida.
En otras palabras, es aislarlo de las actividades de la cadena de valor de los productos o servicios, de una empresa, campo social, vida política, etc.
El calificativo o representación que le da a la ancianidad sin actividad es la vejez sedentaria (cuota inicial de la muerte Samper Pizano). En este orden de ideas, se podría decir que podemos encontrar, también la vejez mercantil, vejez política, vejez social, vejez literaria y toda aquella acción que el anciano puede ejecutar.
No olvidemos que a la vejez se le asocia una serie de estereotipos (imágenes simplificadas), que menosprecian esta etapa. Es evidenciar como el contexto cultural y social, dado por la belleza, juventud, educación, políticas públicas, etc. sirven como representaciones estándar que eliminan, discriminan o infravaloran la vejez.
Miremos esta otra perspectiva, para enriquecer lo que se ha venido tratando hasta este momento. Pero no olvidemos que nadie está a salvo de la muerte y que, si tenemos una buena expectativa de vida, llegaremos a ser ancianos y por ello debemos ser bien prospectivos.
Para Sócrates y Platón (maestro – estudiante) la ancianidad era una materialización de la experiencia y la sabiduría. Es una etapa donde las virtudes morales, la prudencia, empatía, sencilles, discreción, buen juicio, critica, aislamiento de las pasiones, vicios (corrupción, mentira, engaños, etc.). llegan a un nivel muy alto.
En Esparta, desde la visión política. La Gerusía, un órgano de gobierno que existió se integraba por 25 ancianos y dos (2) reyes. Este órgano estaba facultado para la creación de las leyes y la conducción de los asuntos de la política.
Geras en la mitología griega fue la representación o personificación de la vejez y se le veía como compañero inevitable de tánatos. De allí el surgimiento de los geriátricos.
“Los gerontes eran elegidos por la asamblea del pueblo entre hombres escogidos de sesenta años o más y tenían el oficio de por vida. Esto significaba que, a la muerte de uno de los miembros, su lugar se sustituía por elección entre varios candidatos”, (Alfonso López Pulido. El gobierno de los ancianos. La Gerusía en Esparta).
Anverso a lo anterior, desde la dialéctica, existe la postura de Aristóteles (retórica), que para él la ancianidad es percibida como una etapa de decadencia, la cual está cargada de egoísmo, mezquindad, no tienen grandes aspiraciones, requieren lo necesario para lo que resta de su vida, se tornan miedosos. ¿Sera que aquí la cultura jugo un papel muy importante?
Esta contradicción entre la sabiduría, experiencia, mesura contra la decadencia física, mental y visión de futuro, podemos decir que están relacionadas con las creencias, costumbres, estereotipos, y falta de estudios profundos sobre el comportamiento de estas personas en esta etapa.
En roma, a estos personajes no se les dejo de lado, tanto es así, que el senex (latín: anciano. Senectud: 60-80 años), dio origen al concepto de senatus (senado). Los consejos del imperio romano estaban compuestos por 100 ancianos y cada uno de ellos representaba a cada una de las 10 casas (organización social).
Estos ancianos eran los garantes del respeto y eran los que tomaban las decisiones de alta relevancia. De estos lideres políticos están Catón el Viejo, murió a los 85 años, Cayo Mario a los 71 años, Augusto a los 76 años, Vespaciano a los 69 años, Marco Aurelio a los 59 años, entre otros.
Dice en el artículo “Llegar a viejo en la antigua roma, un auténtico privilegio” de la página web; historia national geographic, españa, que los ancianos estaban obligados a trabajar y que estos buscaban ocupaciones como, mensajeros, jornaleros, vendedores, mendigos o músicos. Las mujeres trabajaban como adivinas. Los afortunados eran maestros y las afortunadas nodrizas o comadronas.
Aterrizando en nuestro país, los ancianos pensionados y no pensionados, como sus títulos educativos: analfabetas, técnicos, tecnólogos, profesionales, maestrías, doctorados (PHD), y sus habilidades físicas, se deben tener en cuenta para su reinserción a la vida laboral, siempre y cuando lo deseen.
Existen elementos, como los derechos humanos, el acceso al trabajo y la protección social, que no se pueden tachar, eliminar u olvidar.
La rama legislativa del estado colombiano cuenta con el senado de la república (108) y la cámara de representantes (187), organismos integrados, en totalidad, por 295 legisladores. Existen autores que quieren modificar los artículos 171 y 176 de la Constitución Política de Colombia, con el fin de reducir en ambas cámaras el número de curules. El salario de un congresista es de 34 SMLV (COP $34.417.000).
A lo anterior se le debe sumar la Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) que hace referencia a un grupo entre seis (6) y 10 personas, cuya función es asesorar a los congresistas en los temas asociados a los proyectos de ley. Estos asesores ascienden, teniendo en cuenta que sea en promedio nueve (9) por UTL a 2.655 y sus cargos van de Asistente I – Asistente V y de Asesor I - Asesor VIII, lo que hace que el valor de sus contratos sea variable. De acuerdo con informe periodístico del nuevo siglo (30 abril de 2023), cada UTL demanda o les cuesta a los colombianos, al año, COP$545.115.600 y para la totalidad de ellas su costo es de COP$152.632.368.000, mismo período.
¿Cuáles son las ventajas de esta reducción y qué relación tiene con el tema que venimos tratando?
Pues es muy racional, en tanto que la primera ventaja es que en el presupuesto se incrementará porcentualmente para la inversión en programas sociales y disminuirá para los gastos de funcionamiento.
Por otro lado, y de forma paralela la elección democrática de los cargos para senado y cámara, en su mayoría debería ser para los pensionados. Con ellos no se pierde la eficiencia en los procesos y resultados del trabajo, por lo contrario, se mejoran. El valor agregado es su título profesional, experiencia, sabiduría, conocimientos, moral, ética, relaciones interpersonales.
Estos cargos ocupados por ancianos pensionados no recibirían salario, sueldo, sino una bonificación, pues ya tienen unos ingresos, aspecto que incrementaría el presupuesto del estado.
También podrían ocupar las asesorías en las UTL, cargos de ediles, alcaldes, gobernadores, o ser parte en los centros de investigación científica, adelantar consultorías, etc.
Para finalizar si a un niño no le brindo un contexto de aprendizaje, conocimiento y adaptación, este chico puede perder sus capacidades cognitivas, la calidad de vida y no tener las habilidades para las relaciones interpersonales y comunicación. Con el adulto mayor, la relación entre longevidad y conservación intelectual, no esta distante que con la del niño. Lo que se quiere puntualizar es que el contexto es un excelente catalizador, para motivar y mejorar la ejecución intelectual. El deterioro de un anciano es más de orden cultural (contexto) que de orden biológico.
Un excelente contexto, permite la preservación de las capacidades físicas, emocionales, mentales y sociales. El sedentarismo, es el mejor amigo de tánatos y sociológicamente, es un asesinato social (Friedrich Engels). A lo anterior se suma lo dicho por Lucas, C (Recreation in gerontology, 1964) que, aunque no existieran dificultades económicas en el anciano, su vida podría ser insatisfactoria, mientras no ocupara su tiempo en forma productiva.
Los ancianos generan ventajas en trabajos donde la responsabilidad, paciencia, larga experiencia, seriedad, puntualidad, perfeccionamiento, trabajo en equipo, comunicación y honestidad (enemigos de la corrupción) son requeridos.
En virtud de lo anterior debemos crear, generar, construir contextos motivacionales, para los ancianos, incluido usted que está leyendo, criticando y teniendo en cuenta lo siguiente:
- El poder, la gloria, el ocupar un cargo, se restringe para los mayores de edad.
- En política es el poder del pueblo que se ubica en lo organizacional, pues son los generadores de riqueza y los cargos están establecidos por sus funciones, a las cuales no se le debe adicionar la edad.
- Al joven se le limita por la falta de experiencia y a los ancianos por la edad. Sería bueno cambiar esta visión e integrarlos.
- Hay viejos que no tienen ingresos, para su subsistencia. Se les debe crear un contexto de acuerdo con sus condiciones.
- Hay viejos que no se han pensionado y no lo podrán hacer.
- Los pensionados trabajaran por preferencia, más que por necesidad.
- El no emplear a los ancianos puede llevar al incremento del trabajo informal.
- Se debe evitar el envejecimiento del cargo o del entorno laboral, preservando las capacidades profesionales, como elementos claves en los cargos.
- Los prejuicios sociales que se tienen contra la ancianidad (grupo social específico), discriminándolos, negándolos, excluyéndolos de la vida laboral y social, se le podría catalogar como “Homicidio Político”.
Con el siguiente cuadro quiero que usted se vea como en un espejo cronológico y proyecte, cuántos años más usted podría ser productivo, pensionado o sin pensión.
País | Edad Jubilación | Esperanza Vida | ||
Hombre | Mujer | Hombre | Mujer | |
Francia | 62 | 62 | 82 | 85 |
Alemania | 67 | 67 | 81 | 83 |
Australia | 66 | 59 | 81 | 85 |
Canadá | 65-70 | 60-70 | 80 | 84 |
Japón | 64 | 62 | 82 | 88 |
Rusia | 61 | 56 | 66 | 76 |
Suiza | 65 | 64 | 81 | 85 |
España | 66 | 66 | 80 | 85 |
Colombia | 62 | 57 | 72 | 78 |