No existe todavía un remedio ni una vacuna para combatir la enfermedad Covid-19 producida por el nuevo coronavirus cuyo nombre oficial es SARS-CoV-2. Aunque hay varias líneas de investigación como vacunas (que se estima tomarán mínimo un año), respuestas terapéuticas, equipos de virólogos que trabajan en diferentes compuestos (UNC-Vanderbilt y otro de Emory que trabajan en tres compuestos, por ahora identificados como NHC, EIDD-2801 y EIDD-1931), así como empresas que trabajan con antivirales exitosos (caso del Regeneron) y expertos que estudian los anticuerpos que han generado los sobrevivientes, entre otros.
Hasta ahora, el remedio que lleva la delantera es el remdesivir de Gilead, un fármaco descubierto por un grupo de investigadores de la Universidad de Alberta (Canadá), indicado en el tratamiento del coronavirus que causa el Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS) y el Síndrome Respiratorio de Oriente Medio (MERS). Es un medicamento antiviral de amplio espectro que bloquea la actividad de una proteína que ayuda a los coronavirus a hacer copias de sí mismo.
En la actualidad hay varios ensayos clínicos de remdesivir para tratar el Covid-19: dos los realizan científicos chinos, uno sobre infecciones graves y otro sobre infecciones leves y moderadas; en los Estados Unidos, uno tiene el patrocinio del Instituto Nacional de Salud (NIH); y diferentes países europeos como Italia, Francia, Alemania y España se han unido a la investigación donde se analizan los diferentes grados de gravedad de la enfermedad y los regímenes de dosificación en grupos de pacientes voluntarios.
El arranque de estos ensayos en su Fase III se ha autorizado tras una revisión rápida de la FDA (Food and Drug Administration de Estados Unidos). Es de recordar que la Fase I es para determinar si es seguro el tratamiento, Fase II determina si el tratamiento funciona mediante estudios clínicos con pacientes voluntarios donde además se detectan posibles efectos secundarios, y Fase III, en la cual se encuentra el Remdevisir, busca determinar si el tratamiento bajo estudio es mejor que un tratamiento convencional.
Los estudios clínicos con Remdesivir se proponen probar que el fármaco puede evitar la propagación del virus si se administra a pacientes que ya tienen el Covid-19. En España en una primera prueba se testará sobre 400 pacientes graves, mientras que para la segunda se tomarán como muestra 600 menos graves. El nivel de eficacia se valorará al comparar el número de altas en comparación con las que logra el tratamiento hasta ahora indicado.
Desarrollado por Gilead Sciences, como una respuesta al virus del Ébola que surgió al Oeste de África en 2014, el remdesivir se usó por primera vez en un paciente con el nuevo coronavirus a principios de este año en Estados Unidos. Tal y como se recoge en el “New England Journal of Medecine”, el paciente tomó la medicación el séptimo día de la enfermedad, y mostró una mejora reseñable al día siguiente, con síntomas que finalmente fueron desapareciendo.
Además, en una reciente rueda de prensa en Pekín, el director general asistente de la Organización Mundial de la Salud, Bruce Alyward, expresó que el remdesivir es “el único fármaco disponible que podría tener una eficacia real frente al Covid-19”. Sin embargo, el siguiente paso es “esperar a los resultados en los ensayos clínicos con remdesivir”, que se esperan para finales de abril. Sería un medicamento que se emplearía en principio en casos de pacientes con síntomas más severos u hospitalizados. Los médicos, aunque son optimistas, recomiendan ir con cautela. Por ahora, el control está en distanciamiento social para evitar el contagio y aplanar la curva de contagio, menor cantidad de infectados por día, para evitar el desbordamiento en los sistemas de salud.