El excandidato presidencial y principal dirigente de la Colombia Humana, senador Gustavo Petro, ha tomada relevancia en redes sociales al expresar sus opiniones ante la pandemia del coronavirus y las medidas que el gobierno nacional y los gobiernos locales han tomado —o no han tomado— para enfrentarla. Sin embargo, esa no es su única ocupación. Ya se avecina una nueva elección presidencial y las distintas fuerzas políticas comienzan a plantear su estrategia. Ante ello resulta pertinente conocer la posición de Petro y la Colombia Humana en relación a la cercana campaña política.
Tal posición es expresada de viva voz por el propio Petro. Desde hace un par de semanas, en compañía de su copartidario, el también senador Gustavo Bolívar, publica una columna semanal en un espacio denominado Los Gustavos. Adicionalmente realizan una trasmisión en vivo en la que comentan las columnas y la realidad política del momento, al tiempo que lanzan orientaciones a su corriente de simpatizantes. Entre la columna y las ideas expresadas en la trasmisión, podemos hacernos a una idea de lo que Petro piensa para la próxima campaña presidencial.
En primer lugar, en su más reciente columna ¿Un pacto histórico? invitó al establecimiento y a la sociedad a la firma de un acuerdo que permita una transición, al estilo de las vividas en España y Chile después del franquismo y el pinochetismo, que lleve a Colombia a una realidad diferente a la de violencia y la exclusión que nos ha caracterizado desde hace 200 años. Es una invitación para dejar el pasado atrás.
Un pacto orientado a entregar la tierra a los campesinos, buscando la creación de un campesinado de clase media que sirva de base a la agroindustrialización e industrialización de la economía colombiana; un pacto orientado a la generalización del saber en la juventud, mediante la universidad gratuita; a la masificación de la fibra óptica y las energías limpias como base de la industrialización y la construcción de una sociedad del conocimiento. Un pacto que ponga la riqueza y la prosperidad de todos como base de la paz.
En segundo lugar, en la trasmisión por redes sociales, Petro expresó su posición frente a las venideras elecciones: la concurrencia de los distintos sectores alternativos en una consulta para definir un candidato que vaya a la primera vuelta de la elección presidencial. Consulta a la que deberían ir Fajardo, Robledo, sectores del liberalismo con De la Calle a la cabeza, y el mismo Petro; con el compromiso de que los derrotados deben apoyar a quien sea que resulte ganador por el voto de los colombianos. Igual dinámica, sostiene, debería seguirse para la conformación de una lista única al senado.
¿Y si el llamado centro hace imposible la unidad propuesta? Ese interrogante fue formulado por Gustavo Bolívar. La respuesta de Petro: lo deseable, lo que garantiza el triunfo de la propuesta progresista, es lograr la unidad entre las fuerzas políticas que desean transformar, en asuntos de fondo, a Colombia; pero si no es posible y nos obligan a ganarles, nos tocará ganarles de nuevo, como ya lo hicimos en el 2018.
Así pues, la estrategia de Petro está definida y puesta sobre la mesa: considera dos caminos, trabajar por la unidad de los sectores alternativos, propuesta que ya defendió en la pasada campaña presidencial, y, si no es posible la unidad de los alternativos, competir defendiendo el programa de la Colombia Humana, aspirando a ganar en solitario.
Se trata de una propuesta que ya presentó en 2018. Gran parte de la campaña presidencial pasada la realizó llamando a una alianza entre las llamadas fuerzas alternativas. Desde fines de 2017, cuando todas las encuestas mostraban a Fajardo como el más opcionado, Petro defendió la idea de una consulta que, sobre la base de un programa construido en común, definiera al candidato alternativo. Fajardo nunca aceptó. Igual sucedió con De la Calle, con quien, dice Petro, se llegó a un acuerdo que, a última hora, Cesar Gaviria dinamitó.
Adenda. Los que piden que Petro y Uribe se retiren de la política, sin pedir lo mismo para Fajardo (quien, por cierto, hace años anunció su retiro de la política), son los mismos que quieren que haya uribismo sin Uribe.
