La Contraloría General de la República alertó sobre la caída de la economía, el déficit de las finanzas públicas y otras graves secuelas de la emergencia generada por la COVID-19. En por lo menos 10 puntos del PIB podría crecer la deuda pública de Colombia.
A esto se suman otras dos previsiones negativas: la caída de la economía este año será del 5,5%, de acuerdo a las estimaciones, y las finanzas del gobierno central nacional terminarán con un déficit de 8,2% del PIB.
“Es exactamente lo dicho, es como ir en un vehículo de Fórmula 1 a 350 km/h, y de un momento a otro bajar a 0 km, todos quedamos impactados, quedamos con los brazos cruzados”, dice Yansen Estupiñán, gerente del Gran San.
A todo esto, se añaden los empleos perdidos por estos meses de emergencia y cuarentena: según el Dane, la tasa de desempleo a julio, a nivel nacional, fue del 20.2%. Esto equivale a 4 millones 559 mil personas desempleadas.
“En el segundo semestre de este año la economía registró una caída de 15,7%, frente al mismo período de 2019”, señaló Carlos Felipe Córdoba, contralor.
En ese sentido, según el funcionario, la declaratoria de emergencia sanitaria y de dos emergencias económicas y sociales suponen fuertes restricciones al aparato productivo, y han dejado necesariamente unas secuelas preocupantes.
“Es posible que suframos un retroceso de 10 años en el avance logrado en temas como la distribución del ingreso, la mejora en los índices de empleo formal. Los sectores más vulnerables y las empresas medianas y pequeñas se verán sensiblemente afectados”, indicó.
En esta época de crisis, nuevas estrategias como las plataformas digitales son algunas alternativas que han permitido oxigenar a los sectores económicos.
“El orden del 40% de la economía estaba cerrada, en virtud de las necesidades que se tenían del manejo de la crisis de salud pública. Hoy en día eso ya no es del 40%, sino del 10%, es decir que ya estamos recuperando un poco de normalidad”, comentó el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla.
La Contraloría General espera que con la estrategia Compromiso Colombia se reactiven las grandes obras de infraestructura críticas del país y haya un incremento en las ofertas de empleo.