En el Hospital Ricardo Acosta de Palocabildo cada quien se cubre para salvar su pellejo. Los pacientes exigen atención y la paciencia, después de horas extenuantes de espera, pone límites, y los pacientes que exigen respeto utilizan formas inadecuadas cuando se salen de la ropa. No se sabe qué pasa con la superintendencia de Salud Departamental del Tolima que no investiga ni pregunta a la comunidad sobre la problemática.
El 29 de junio, por la noche, las pistolas aparecieron para exigir que los médicos atendieran a una señora que pedía atención de urgencias. Mucho tiempo había transcurrido hasta que apareció el marido de armas tomar y exigió la atención a pesar de que los médicos habían dicho que no era ninguna urgencia. La policía hizo presencia, los médicos iban a renunciar, pero todo se calmó y la vida continúo en el hospital como si nada.
Varios casos han hecho que la crítica de los habitantes expresen rechazo, pues como una burla han sido tomadas las actuaciones médicas que a todo le dicen que no es urgencia. El 21 de junio la señora Jaidile Quintero fue llevada a eso de la 1 p.m, en una buseta de Cootrasnorte, pidiendo ayuda por falta de oxígeno el cual le fue negado; cuenta la jerga popular, pues no fue catalogada como urgencia; un infarto no reconocido por los médicos produjo su deceso.
Una de las glorias del ciclismo en Palocabildo, Álvaro Yamid Gómez, también llegó enfermo de gravedad con un problema de dolores renales y su remisión no se hizo a tiempo. Fue trasladado por una señora muy reconocida en Palocabildo. Lo trasladaron en un vehículo particular al Hospital de Honda, después fue remitido a Bogotá, en donde quedo recluido y está en recuperación para ser intervenido por un problema de riñones.
La señora Blanca Pimentel también murió después de ser llevada al hospital Ricardo Acosta.
La señora Clemencia Briceño Ramos tuvo un accidente de tránsito en la salida a Mariquita, los médicos del hospital Ricardo Acosta le dijeron que no tenía ninguna lesión. Sus familiares la trasladaron a Ibagué en donde le diagnosticaron una lesión cráneo encefálica. El neurocirujano del Federico Lleras solicitó la búsqueda de una USI urgente por su estado de gravedad.
Muchas quejas que dejan que pensar sobre la atención medica en el Hospital de Palocabildo. Como siempre las comunidades miran con extrañeza la falta de presencia de las veedurías ciudadanas, del concejo municipal, de la junta del hospital que al parecer no ve con seriedad el problema.
Ambulancia abandonada hace mas de cuatro años.
Como si fuera poco, la falta de ambulancia nos hace mirar que en un parqueadero en Palocabildo existe hace cuatro años una ambulancia que paga parqueadero. Este lucro cesante no le importa a nadie; los habitantes solo observan y critican pero no denuncian porque nadie les para bolas. El caso es que esos dineros que se pagan de parqueadero no tienen lógica cuando existen gerentes y administradores responsables que deben definir qué hacer con bienes obsoletos e inservibles: menos producir más gastos innecesarios. Al parecer esa ambulancia se arregló pero quien lo hizo la dejó peor de lo que estaba y el hospital necesita ambulancias. Pero también en el hospital de San Sebastián de Mariquita otra ambulancia de Palocabildo, la OLG 075, estuvo más de seis meses en ese lugar.
En el mismo parqueadero de palocabildo, la Gobernación del Tolima y la alcaldía del municipio tienen vehículos hace mucho tiempo pagando parqueadero. Igualmente, una maquinaria dañada o desechada también está en el mismo lugar y ningún funcionario hace ni dice nada sobre estos activos despreciables.
Un buen administrador ya habría hecho algo, al menos para rescatar un dinero que sirva para otro bien público que genere servicio.
Queremos aclarar que el parqueadero solamente cumple su función de prestar un servicio y seguramente esto no lo compromete con ninguna irregularidad.
Los palocabildences esperan soluciones a los problemas de salud; quieren un verdadero hospital en el que el servicio sea prioridad y el respeto por el paciente así sea gente humilde, se brinde con calidad, buen conocimiento y de buena manera, para evitar que existan mas escándalos y enfrentamientos que no dejan nada bueno.
