El grupo Ardila lleva años dándole vueltas y vueltas a la vaina. ¿Cómo hacer para revertir una tendencia que los condena desde el 2011, un año después que Uribe dejó el poder? Si, en los dosmiles, en la época de la Seguridad Democrática, eran los amos. Todo les funcionaba, hasta la Cosa Política de Vicky Dávila. Pero ese apego al uribismo los condena y ellos parece que no saben medirle el pulso a un país que cambió. No saben por ejemplo, que Uribe tiene una imagen negativa de más del 60 por ciento, que la gente votó por Duque no porque quisieran al Gran Colombiano sino por miedo a Gustavo Petro.
Y lo están pagando. Caracol literalmente los acribilla, el Rating lo tienen en 15 puntos en tiempos de Coronavirus y Juan Diego Alvira es la máxima estrella de la tv colombiana. De pronto es eso, de pronto el problema es de presentadores, la gente ya está agotada de las Gurisatti, el público demostró que la tirria que genera Hassan es unánime, hay que buscar un rostro nuevo, alguien que no busque encender las redes con su uribismo trasnochado, pasado de moda. Si quieren revertir la tendencia deben ya buscar un talento entre la multitud. No es problema de dirección, es que el formato medio amarillento, los peinados, la actitud es francamente pasada de moda, acartonada. Ver en un televisor RCN es como viajar al pasado.
La curva descendente sólo cambiará con rostros nuevos. Va a ser difícil que aparezca un nuevo Alvira