Daniel Quintero es una obediente pieza más en el ajedrez de una batalla política entre distintos grupos económicos que se están disputando las EPM y las megaobras del departamento de Antioquia.
A muchos de estos grupos económicos foráneos les había sido vedado el acceso a contratar en nuestro departamento. Lo anterior en virtud del enorme poder de los equipos políticos de nuestro terruño al servicio del GEA... poder político, incluso, que ha montado varios presidentes durante los últimos veinte años (Uribe, Santos I y Duque).
Es claro que detrás del referido enfrentamiento están los defensores políticos de esos grandes grupos como son: Álvaro Uribe Vélez (en defensa del Grupo Empresarial Antioqueño, GEA), y César Gaviria Trujillo, Vargas Lleras y Juan Manuel Santos (dos empeñados en la defensa de intereses económicos que han jugado tradicionalmente por fuera de Antioquia, especialmente, asentados en Bogotá y la Costa Atlántica y, muy probablemente, en el exterior como puede desprenderse del escándalo de Odebrecht).
¿Saben? Si nos detenemos a leer, de modo juicioso, los discursos que puede derivarse de lo publicado y expresado por los dirigentes uribistas en contra de Daniel Quintero y, los gaviristas, vargaslleristas y santistas, en favor del alcalde de Medellín, vamos a poder inferir qué es lo que está en juego no solo para nuestra ciudad sino para toda Antioquia, si se entiende que esto de la revocatoria del mandato es solo un esfuerzo avalado por el GEA en un intento político desventajoso por tratar de recuperar el poder en las EPM, las cuales venía controlando, sin intervención social alguna, desde la época de Fajardo hasta la de Fico Gutiérrez.
En el caso del departamento, es igualmente evidente la tesis expuesta a la luz de una pregunta: ¿cómo se explica que el gobernador de Antioquia Aníbal Gaviria Correa, investigado y encarcelado por la Fiscalía del Dr. Barbosa (de clara estirpe uribista), resulte libre y armando coalición mayoritaria con el uribismo y que dicha investigación se hubiera quedado en el congelador como si nada hubiera pasado? La respuesta, otra vez, es el GEA, pues no es conveniente para este grupo económico que sus alfiles políticos en este departamento, se pongan a pelear entre sí, en un momento en que la disputa ha trascendido el poder regional y se están jugando intereses nacionales y hasta compromisos supranacionales.
Una triste democracia de ciudadanos convencidos de que la revocatoria de un alcalde es la perdición o la salvación de Medellín, mientras los grupos económicos continúan financiando sus alfiles políticos en los diferentes partidos y jugando sus intereses particulares sin que la gente de a pie cuente.