Colombia se apresta a acudir el próximo 29 de octubre, a las urnas para elegir a las autoridades regionales en Departamentos y Municipios del país, quienes asumirán los cargos para el periodo 2024-2027.
Durante este mecanismo de Participación Ciudadana, serán elegidos 32 gobernadores, 418 diputados, 1.102 alcaldes, 12.072 concejales y 6.513 ediles.
Ha sido esta campaña política una, de las más negativas, en donde -la guerra sucia- se ha evidenciado, una muestra de ello es que, sus perfiles comunicacionales han sido utilizados como contenidos de críticas ilegitimas, publicidad negativa, insidiosa o dañina y su foco principal son las acciones, posturas y propuestas de los candidatos en la vida pública y privada.
Estas ‘operetas’ han sido instrumentos de publicidad que han sido utilizadas deliberadamente, para desviar la atención del elector sobre lo realmente importante y
conllevan a que los votantes olviden lo esencial que debe ser: exigirles a los candidatos que digan qué propuestas tienen para revertir nuestros problemas y, presentar las posibles soluciones, por las que el pueblo demanda.
El desconocimiento del Estado y su Administración, debería ser una vergüenza para algunos aspirantes, que debería, ser tenida en cuenta por el elector, en el momento de depositar el tan anhelado voto.
Se ha visto de todo, se ha esculcado hasta en el pasado de los antepasados de algun@s candidat@s, para enrostrarcelo a su contendor@; el "juego sucio" en su máximo esplendor, es el verdadero "programa de gobierno" de algun@s.
Ni que decir del derroche de dinero que muestran y, que refleja, el poder detrás de algunas "campañas", mientras a algunas les falta, en otras, el reflejo de poder económico, se puede palpar en cada una de sus acciones.
«Pero, no es el que más invierte, el que siempre gana»
¡Ya lo sabemos!
Un claro ejemplo, la anterior campaña a la Presidencia de la República, soy testigo de excepción que la campaña con menos inversión, derrotó la extravagante campaña del contendor.
Para finalizar, recordemos que los testigos electorales son piezas fundamentales para «cuidar el voto» de cada candidat@, un buen trabajo de cada un@ (testigo) ofrece un claro resultado, difícil de adulterar.