Cuando unos alcaldes de la Costa Caribe deciden amarrarse las manos como simbolismo de las ataduras que tienen para actuar en contra de la empresa prestadora de energía Electricaribe, por tantos abusos cometidos a lo largo y ancho de los 7 departamentos, es porque las cosas para nosotros como usuarios están grave en la defensa que se tiene para exigir por todas las vías legales un servicio óptimo y de calidad.
Bloqueos en Barranquilla, Santa Marta, Bolívar en las últimas semanas es muestra de las arbitrariedades de esta empresa contra los habitantes de la costa, donde abusan en los cobros, reconexiones no autorizadas, doble facturación, fluctuaciones de voltaje, transformadores en pésimo estado, amenazas constante con corte del servicio, instalación de medidores sin claridad jurídica los cuales cambian bajo el argumento de un avance tecnológico, los cuales no presentan factura, certificado de calibración ni garantía lo que lleva a la eliminación de la lectura física limitándola a una lectura tramposa hecha por la empresa a través de internet, donde el usuario desconoce su consumo; son apenas unas muestra de lo que esta empresa diariamente comete contra 2,2 millones de usuario en la Costa Caribe.
No solo las Farc son las terroristas cuando atentan contra la vida, honra y bienes de ciudadanos, una empresa como Electricaribe también lo hace cuando fustiga el desarrollo de una región con los daños ocasionados por la no prestación del suministro de energía y cuando explota a sus mismos trabajadores con bajos sueldos y horas indefinidas de trabajo. Pero lo que más irrita es que esta empresa generadora de disturbio es protegida por el mismo Estado en todas sus modalidades: para resguardarse utilizan a la policía, para sostener sus abusos a la Superservicios que es una alcahueta y para garantizarle las finanzas a la Comisión Reguladora de Energía que le autorizó un alza tarifario del 96% lo que le representará unos ingresos adicionales de 3 billones de pesos. ¡El descaro es grande y la desprotección a los usuarios costeños es enorme!
La excusa de la empresa es que esta zona del país en carga de energía crece al 12 %, mientras que el país lo hace a un 9 %,pero esto no es del todo cierta, ya que la subnormalidad es otro negocio que le conviene a Electricaribe ya que le genera subsidio que cubre el Gobierno. La razón de fondo es que esta empresa filial de la española Unión Fenosa no está haciendo su inversión; lo que le falta es voluntad de inversión como capital privado y que el Gobierno encabeza del presidente le exija cumplir con su papel de empresa prestadora capaz de atender y garantizar el suministro de energía. Y si no, que se abra un proyecto de ley de libre competencia donde pueda entrar otra empresa con idoneidad a prestar el servicio, y que se les dé a los usuarios las garantías de la libre escogencia.
Porque esto no puede seguir, que se le siga dando la zanahoria a Electricaribe mientras a los usuarios se les da garrote.