La alcaldía de Barranquilla, a través de la oficina de servicios públicos y la empresa de aseo, alcantarillado y agua (Triple A), adelanta una minuciosa inspección del estado actual de los arroyos de la ciudad para tomar acciones preventivas de limpieza y evitar así suspensión del acueducto o inundaciones por desbordamientos.
Las escenas que vemos a diario en Barranquilla son deprimentes. Personas sin sentido común o de pertenencia y con un bajo nivel de respeto que residen en los barrios del suroriente, arrojan basuras y todo tipo de desechos, entre ellos animales muertos (perros y gatos) a los arroyos. Si no les bastara con tirar la basura a los afluentes, las dejan regadas en los puentes de los arroyos y calles, obstruyendo el paso peatonal, poniendo en riesgo sus vidas, ya que deben caminar por la carretera, literalmente en medio de los vehículos.
"Todavía encontramos personas que arrojan sus basuras a estos cauces y es lo que debemos detener para evitar que vuelvan al estado en el que estaban a comienzos del año, en el que encontramos toda clase de materiales", explicó el jefe de la oficina de servicios públicos, Juan Carlos Gómez Vallejo.
La problemática de arrojar decesos a los arroyos no solo se vive en Barranquilla, sino también en el municipio de Soledad. Un caso particular se evidencia en el barrio Los Robles, en dónde algunos residentes arrojan escombros y toda clase de basuras a la vía principal, al Bulevar y al arroyo denominado Don Juan, el cual forma sus afluentes en el barrio Las Moras del mismo municipio.
Debemos tomar conciencia y ver el daño que le estamos causando a la naturaleza y a nosotros mismos.