Émilie Le Tonnelier de Breteuil, marquesa de Châtelet, fue una mujer importante en la historia de las matemáticas y la ciencia. Además, dedicó su vida al estudio de las obras de los grandes científicos de la época.
Socialmente se encontraba en una posición privilegiada, dado que su padre era Louis-Nicolas Le Tonnelier de Breteuil, barón de Preuilliy y jefe de protocolo de la corte de Luis XIV, lo que permitió que se relacionara con personas importantes.
Su padre estaba sumamente preocupado por el aspecto físico de Émile, para él ella era poco atractiva: muy alta, torpe, de pies grandes y con mucha fuerza. La comparaba con un leñador. De hecho, llegó a considerar enviarla a un convento, dado que tenía miedo de que no fuese a encontrar esposo. Estas fueron las razones por la cual el barón de Preuilliy le brindó una buena educación.
Émilie, al no poder asistir al colegio como sus hermanos, recibió educación rodeada de un entorno intelectual, frecuente en su casa. Estudió latín y griego, alemán, inglés, matemáticas, física y música. Aunque su experticia era en cálculo diferencial y derivadas.
Más adelante, Émilie conoció al marqués de Saint–Lambert, del que se enamoró y quedó embarazada (a los 42 años). Se encontraba trabajando en la traducción de la Principia de Newton durante su embarazo y temía no sobrevivir al parto, dado que la tasa de mortalidad materna era muy alta en la época.
Por esta razón no descansó intelectualmente durante toda la gestación de su hija. De hecho, cuando la parió lo hizo en el despacho mientras trabajaba. Lastimosamente, a los días de parida, ella murió y acto seguido su hija.
Émilie fue una gran matemática, realizó la traducción del latín al francés de Principia Matematica de Newton y realizó comentarios al texto para facilitar su comprensión y estudio. La historia y las matemáticas penosamente le siguen dando crédito a Voltaire por los aportes de Émile.
Este es solo un caso de las tantas mujeres matemáticas que han realizado grandes aportes a la ciencia y no se le reconoce su autoría intelectual.