Ese atavismo que nos persigue desde hace milenios hay que superarlo. No puede ser que una sociedad ampliamente alfabetizada y con la posibilidad de aprender de forma relativamente sencilla tenga necesidad de alguien que la mande. Se requiere de ciudadanos empoderados, no de ovejas que requieran líderes.
De verdad, los mismos que denostan del "mesías" suelen ser los que lloran cuando asesinan a un "líder". Sin embargo, el problema de fondo es y será siempre la existencia de esa figura. En una sociedad en donde todos sus miembros piensan y deciden por sí mismos, ninguna fuerza legal o ilegal va a resolver sus problemas matando a todos los otros; aun cuando no niego que teóricamente es posible, pero en sí es la alternativa menos viable.
Así pues, la causa del problema perverso que es el asesinato de líderes es precisamente la promoción de la existencia de estas figuras. Además, si la cooperación internacional realmente quisiera ayudar, promovería el empoderamiento de todos los ciudadanos en las situaciones con conocimiento y acción.
Los que matan a los líderes lo hacen porque tienen un alto grado de certeza de que si los eliminan la comunidad no proseguirá en el camino que los llevaba su líder... pero si en la comunidad todos piensan y deciden un camino, y no existe esa figura, las opciones de los que asesinan se reducen a acabar con todos o tratar de convencerlos por otros medios, bien sea amedrentamiento o razones pacíficas de acuerdos.
El amedrentamiento sostenido es costoso para los que asesinan líderes, y eliminar a una comunidad convencida (que en la práctica es la fuente de poder que quieren tener) es un camino con poca sustentabilidad. Por lo que si se acaban las figuras de líderes sociales, el círculo eterno de la violencia podría llegar a su fin.
En conclusión, no más líderes para poder alcanzar una paz estable y duradera.
Posdata. Leí hace poco un documento de la Universidad Nacional sobre asesinatos de líderes sociales con un muy pobre rigor conceptual, al menos desde un punto de vista estadístico. De verdad, es triste ver el uso del término correlación en el texto... también es doloroso observar cómo se desperdician los impuestos de los ciudadanos de los Países Bajos en trabajos tan chimbos como este.