La barra simbólica fue alcanzada este martes 12 de julio. El valor del euro cae y el dólar sale reforzado. Ambos alcanzan una paridad que no se había visto hace 20 años. Europa está siendo impactada por la guerra en Ucrania y los cortes de suministros de gas, por lo que la economía estadounidense aparece más robusta a los ojos de los inversores.
La primera consecuencia de esta paridad es que "el costo de todas las transacciones en dólares aumentará en la zona euro" explica el especialista de temas económico de RFI, Orlando Torricelli. Se trata del fenómeno llamado "inflación importada": entre más se devalúa una moneda, mayores son los costos de las importaciones.
Desde el inicio del año, la factura del petróleo aumentó en un 8% como consecuencia de la caída del euro. Otras materias primas han sido impactadas también y el gasto energético va a tener peso en el déficit comercial de los países europeos.
El sector turístico sale victorioso
Además de las materias primas, muchísimos intercambios comerciales entre Europa y Asia se realizan en dólares. Es el caso de los componentes electrónicos. Aunque las grandes empresas en general están cubiertas contra estas variaciones cambiarias, las pequeñas están más expuestas.
Quien sí acabará ganando con esta paridad es el sector turístico ya que una tasa ventajosa tendrá como efecto un mayor estímulo del sector, en especial con la llegada de viajeros provenientes de Estados Unidos. Pero "es una dificil ecuación para el Banco Central Europeo que podría verse en dificultad si quiere terminar con su política monetaria expansiva subiendo las tasas de intereses, anticipa Torricelli.
La guerra en Ucrania y la dependencia energetica está afectando mas a Europa que a Estados unidos "y el temor de una recesión impulsa a los inversores a refugiarse en valores como el dólar" concluye.
El 4 de enero 1999, la cotización inicial del euro fue de 1,1789 dólar por unidad europea. Y el 15 de julio 2002, la moneda única alcanza la paridad con el dólar, por primera vez desde febrero 2000.