En Agosto del 2010 la Alcaldia de Jorge Iván Ospina le entregó a Fidupetrol el manejo de los recursos, 530.000 millones, de las 21 megaobras de Cali. La Fiduciaria Petrolera S.A resultó escogida en la modalidad de selección abreviada a través de una convocatoria pública. Fidupetrol fue la única proponente y el encargo fiduciario (4151-SA-01-2010) cuyo objeto era recaudar y manejar los recursos provenientes del impuesto de valorización municipal, fue adjudicado por el secretario de infraestructura Juan Diego Flórez, por delegación del alcalde Ospina y firmado por el representante legal de la empresa Luis Carlos Hurtado Sarmiento.
El contrato venció el 31de diciembre del 2013; tres meses después la Corte Suprema de Justicia conminó a Fidupetrol a devolver 22.000 millones a la gobernacion del Casanare y en mayo de ese mismo año, la Superintendencia Financiera ordenó la liquidación de la fiduciaria, quedando tendidos en el camino un gran número de acreedores. El último intento fallido de Fidupetrol para no responder por su deuda con la gobernación del Casanare fue la tutela que presentó ante la Corte Constitucional que derivó en escándalo Pretelt. Hasta el momento ninguno de los directivos o representantes legales de Fidupetrol han sido llamados por la Fiscalía a responder penalmente a pesar de la indicación de la sentencia de la Corte Suprema de Justicia.