El pasado 13 de enero, en la ciudad de Chengdu, provincia de Sichuan, se conoció el super tren Maglev capaz de poner una velocidad de 620 kilómetros por hora que impondría un record mundial en velocidades terrestres.
El tren funciona con energía superconductora de alta temperatura (HTS) que hace que parezca que el tren flota a lo largo de las vías magnetizadas. Aunque faltaría mucho para ser aprobado como un proyecto de infraestructura financiando por el gobierno de Xi Xinping, ya existe un prototipo de 21 metros de largo y una via de 165 metros para demostrar su funcionamiento.
Un profesor fue el creador de dicho prototipo. He Chuan, vicepresidente de la Universidad Jiaotong, se jugó su trabajo en el desarrollo de dicho proyecto que, inicialmente, no tuvo mucha acogida entre sus colegas de trabajo. Oriundo de la provincia de Sichuan, He se ha pasado la vida estudiando los recursos de esta región china, los cuales han sido clave para desarrollos tecnológicos que se han exportado a todos los rincones del mundo. Propiamente en China, esta provincia ha sido pionera en el desarrollo de sistemas de transporte de alta tecnología como lo sería el nuevo Maglev. "Sichuan tiene ricos recursos de tierras raras, lo que es muy beneficioso para nuestra construcción de pistas de imanes permanentes, promoviendo así el desarrollo más rápido de experimentos" dijo en la rueda de prensa para la presentación de su nueva invención.
China alberga la red ferroviaria de alta velocidad más grande del mundo, que se extiende por más de 37.000 kilómetros, y el tren de funcionamiento comercial más rápido: el Maglev de Shanghai. El primer tren Maglev de alta velocidad del país, comenzó a operar en 2003. Corriendo a una velocidad máxima de 431 km por hora, conectando el aeropuerto de Shanghai Pudong y Longyang Road en el lado este de Shanghai.
Y es que el gobierno chino ha demostrado mucha ansiedad por seguir llevando la infraestructura de transporte a otro nivel por la proximidad con los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022, que tendrán lugar en Beijing. Hace un año exactamente, en Beijing se inauguraba una nueva ferrovía de alta velocidad con una extensión de 174 kilómetros entre la capital y la ciudad de Zhangjiakou, que será sede de los aclamados juegos en el 2022. Dicha vía redujo el tiempo de viaje de tres horas a 47 minutos.
En los primeros días de enero 2021, además, China sorprendió a sus ciudadanos con un nuevo tren bala diseñado específicamente para soportar temperaturas bajo cero. El tren CR400AF-G puede viajar hasta 350 kilómetros por hora en un clima tan frío como -40 grados centígrados, otra invención con la que los chinos quieres deslumbrar al mundo en el 2022.