James Rodríguez pasa por uno de sus peores momentos a nivel futbolístico. Terminó la temporada entre lesiones por las que jugó pocos minutos en los meses anteriores a la Copa América. Eso a la larga le resultó con la exclusión de parte de Reinaldo Rueda de los convocados al torneo continental.
La situación empeoró cuando el técnico que más lo ha consentido, Carlo Ancelotti, salió del Everton y además llegó Rafa Benítez, el primero que lo mandó a la banca en el Madrid. Ahora James también se encuentra aislado por un posible positivo de COVID-19.
Uno de los exfutbolistas históricos en referirse a la situación de James fue Faustino Asprilla. En entrevista con Semana el Tino dijo que James "tiene que entrenarse bien y no farandulear más. Debe hablar menos y y jugar más".
Asprilla dice James debe hablar menos debido a que recientemente el colombiano se ha dedicado a stremear en Twitch. Allí además de jugar distintos videojuegos responde preguntas de varios seguidores y eso no le gustó mucho.
La cuestión no es la indignación del Tino por el comportamiento de James, sino que él es el menos indicado para hablar de comportamientos de jugadores. Si dice que James debe entrenar y no farandulear se le olvida que él era el rey de la farándula con sus famosas fiestas y no entrenaba bien ya que llegaba enguayabado o hasta ebrio a entrenamientos y partidos.
Por recordar algunos episodios de Asprilla, se perdió una semifinal importantísima de Recopa de Europa contra el Atlético de Madrid en 1993 por un accidente de tránsito en Tuluá, donde iba en estado de embriaguez.
O también recordar cuando en 1995 el técnico del Parma, Nevio Scala, lo echó por llegar 15 minutos tarde al entrenamiento. Asprilla se puso furioso, le dijo a Scala hasta de qué se iba a morir y el técnico no se aguantó su patanería. El Tino pudo ser tal vez el mejor jugador del mundo pero no quiso y, pese a tener una carrera muy exitosa, dedicó mucho tiempo al entretenimiento.
Es imposible ocultar el mal momento que vive James y que todavía no le permite ser aquel jugador de 2014 y 2015 que maravilló al mundo. Pero por lo menos tiene mucho más claro el concepto de disciplina y sacrificio que en su momento tuvo Asprilla.
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