El secretario general de la ONU, Antonio Guterres ha nombrado a la diplomática María Ángela Holguín Cuellar como nueva enviada especial de esa entidad para Chipre, un cargo que se encontraba vacante desde 2017, y que forma parte de la misión que opera en la isla mediterránea desde el año 1964 y busca evitar enfrentamientos entre las comunidades grecochipriota y turcochipriota.
Politóloga de la Universidad de Los Andes, Holguín tiene amplia experiencia diplomática, la cual inició en 1993, durante el gobierno de Gaviria, donde desempeñó funciones comerciales como la primera secretaria de la Embajada de Colombia en Francia. Luego, en 1994, Holguín fue nombrada jefa de gabinete del Ministerio de Relaciones Exteriores y un año después, en 1995, tuvo su primer gran reto: organizar la cumbre del movimiento de Países No Alineados de Cartagena, de ese cargo pasó a ser secretaria general de ese Ministerio hasta 1997.
Durante la campaña presidencial de Álvaro Uribe, coordinó el comité de asuntos internacionales y, tras su victoria, fue designada embajadora de Colombia en Venezuela de 2002 a 2004, donde estableció una buena relación con el entonces presidente Chávez. Ese mismo año fue nombrada embajadora ante las ONU, cargo al que renunció en 2006 en protesta por el nombramiento de tres hijos de políticos en su embajada, como pago de favores por parte de Uribe. Volvió a la Cancillería como ministra de Relaciones Exteriores durante los dos períodos del gobierno de Juan Manuel Santos entre 2010 y 2018.
La exministra había mantenido un perfil bajo luego de su paso por el gobierno Santos, desde su casa de en la región de Villa de Leyva en Boyacá, parte de su tiempo lo dedica a en un emprendimiento de cremas para el cuidado de la piel marca Granate Organic. Había anunciado que se retiraba de la política y se concentró en 2018 en apoyar marginalmente la campaña presidencial de su pareja Sergio Fajardo quien seguirá en su lidia con el Partido Dignidad & Compromiso. En el entre tanto escribió un libro sobre Venezuela, país donde fue embajadora y con el que estableció relaciones cercanas en el gobierno Santos. Esporádicamente escribe en El Espectador sobre temas internacionales.
El conflicto en Chipre es de vieja data. La isla se divide entre la República de Chipre, de mayoría grecochipriota, miembro a la Unión Europea donde se habla griego, y la autoproclamada República Turca del Norte de Chipre de mayoría turcochipriota, con lengua y moneda turcas, y solo es reconocida por Turquía. La misión de la ONU en Chipre vigila la zona de amortiguación, una franja que se extiende a lo largo de la isla y que separa el sur del norte de la isla, dividido tras la invasión de Turquía en 1974 donde este país ocupó el tercio norte de la isla.
