Jaime Lacouture, el guajiro que por cuenta del partido Conservador fue magistrado del consejo electoral y ahora secretario de la Cámara de representantes no perdió la oportunidad de estar con Gustavo Petro en la visita presidencial a Uribia, en donde es alcalde su gran aliado Bonifacio Henríquez a quien se le recuerda por sus parrandas en plena pandemia.
Henríquez ha hecho fiesta con la contratación directa, como el último contrato de internet para escuelas rurales en su extenso municipio en el que la mayoría de la población es wayuu, con un jugoso presupuesto por cuenta de las regalías, pero con una precaria cobertura de servicios públicos que no le llega ni al 2% de la población.
Sin importar su condición de funcionario, el secretario de la Cámara se ha dejado ver por el municipio, acompañando a otros funcionarios y congresistas del investigado Carlos Andrés Trujillo, su jefe político y a quien el alcalde de Uribia respaldó con no menos de 20.000 votos que le sirvieron para convertirse en el senador más votado del Partido conservador. Votos que le ayudaron para ganarse el respaldo del senador paisa.
Lacouture llegó al cargo con un pasado turbio: controvertido liquidador de Ferrocarriles Nacionales, fue la cara visible de la ‘Ñoñomanía’ en La Guajira y terminó salpicado en el caso Odebrecht y logró hacer una cabriola impensable: sin concluir su período como magistrado del Consejo Nacional Electoral logró ser elegido como Secretario de la Cámara de Representantes con una buena chequera y burocracia para disponer.