La reforma tributaria que presentó el Gobierno Duque reposa sobre los hombros de Luis Alberto Rodríguez, un economista de la Universidad Nacional quien a sus treinta años se ha convertido en el viceministro técnico de Hacienda más joven que se recuerde. Rodríguez se volvió la mano derecha del ministro Alberto Carrasquilla. Llegó a su equipo de Hacienda en el empalme por recomendación de la vicepresidente Marta Lucía Ramírez, quien lo tenía en su grupo económico durante la precandidatura presidencial y lo consideraba un posible ministeriable, como lo escribió en su cuenta de twitter en 2017.
Mínimo 4 Ministros de Hacienda en el Pipe Line de mi equipo de Programa:Andrés Londoño; Luis Alberto Rodríguez; Sara Piñeros y Freddy Castro https://t.co/og4ooUmi54
— Marta Lucía Ramírez (@mluciaramirez) 28 de octubre de 2017
Durante el mes que dura el empalme, Rodríguez convenció a Carrasquilla con su trabajo y se ganó el viceministerio. Carrasquilla decidió confiarle la responsabilidad de la ley de financiamiento. Durante la socialización a medios que hizo el gobierno del proyecto, el presidente Duque sentó a su secretario general Jorge Mario Eastman a su derecha y al ministro de Hacienda a su izquierda, quien al mismo tiempo solo estaba acompañado de Rodríguez, a quien lleva a todas las reuniones y se le ve siempre acompañado en público. El joven vallenato, quien tiene además una maestría en Administración Pública de la Universidad de Columbia, y tres experiencia trabajando en el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo —PNUD— deberá salir a defender el polémico proyecto en el Congreso después de que se anunciara que el gobierno pensaba gravar el 80% de la canasta familiar, pero no a las bebidas azucaradas, una dura prueba que tiene por delante a pesar de conocer la reforma como la palma de su mano.