Es cierto, a veces la historia se detiene en una fotografía y esta será una de las que pase a rellenar los álbumes de la historia de Latinoamérica. Cuando terminaba la cumbre de presidentes de américa en Panamá y se tomaba la fotografía de registro, el presidente Santos no se resistió a aceptar la invitación del presidente Castro para unirse al saludo de sus colegas socialistas: el símbolo del puño cerrado. Un símbolo que se consagró en la dictadura en Rusia de Stalin y que luego de que fuera adoptado como saludo militar por el brazo armado del Partido Comunista de Alemania (KPD).