Las mujeres colombianas afrontan en la segunda vuelta de las elecciones a la presidencia del 19 de junio uno de los retos más importantes en la historia reciente del país, pues se enfrentarán a una decisión cuyo papel protagónico recae sobre ellas. Nada más y nada menos que dar un paso gigante en el camino que vienen recorriendo y por el cual han alcanzado el reconocimiento de sus derechos o retroceder a las épocas en donde se les relegada a la crianza de los hijos y las labores domésticas como única misión en sus vidas.
Para la segunda vuelta las cosas están así:
El censo electoral es de 39.002.239 personas habilitadas para votar, de las cuales 20.111.908 son mujeres y 18.890.331 son hombres. La abstención estuvo en el 46%, lo cual quiere decir que hubo un total de 21.375.575 votantes, si calculamos que las mujeres son el 52 % del total de votantes serían las que votaron en primera vuelta y un porcentaje de las que no lo hicieron quienes darán un remezón drástico a la balanza electoral. Pero ¿A dónde irán esos votos?
Pues la amenaza que hoy se cierne sobre las mujeres a lo largo y ancho del país es que con la llegada de Rodolfo Hernández a la presidencia Colombia se vuelva una expansión de lo que ocurrió en Bucaramanga cuando este fue alcalde.
Vamos a los datos.
Desde su llegada a la alcaldía de Bucaramanga en 2016 aumentaron los homicidios contra mujeres (10 en ese año a causa de su pareja o expareja). Se reportaron 1.119 casos de violencia intrafamiliar y 710 casos de violencia de pareja de acuerdo a cifras de medicina legal. En su momento en debate de control sobre violencia contra la mujer su secretario de salud respondió: “No podemos seguir creando talento humano para corregir las consecuencias”. Ahí quedó demostrado el talante machista de la administración de Rodolfo Hernández y eso sería lo que les espera a las mujeres colombianas si él llega al poder.
El “ingeniero” es un tipo machista, que dice abiertamente que las mujeres no deben meterse en política, sino estar en la casa y escuchar sin opinar. Aunque luego haya dicho que lo malinterpretaron por sus declaraciones antes de la votación, lo cierto es que este martes ya en segunda vuelta repitió lo mismo y literalmente le dijo a Gustavo Gómez en Caracol Radio que: ”[eso allá en la presidencia de la república hay una oficina que se llama primera dama, eso le ponen como 20 carros, guardaespaldas, choferes, tamales, arepas de huevo, pa’ llevar las amigas allá a joder, a perturbar ¿eso pa’ qué?, ella puede ayudarme desde aquí”.
Y a renglón seguido continúa diciendo: “Entonces eso lo tragiversaron diciendo que era que yo quería que las mujeres no trabajaran, y pues lo ideal sería que las mujeres se dedicaran a la crianza de los hijos…(sic)”. Nada mas que agregar, el tiempo de las cavernas ha vuelto.
El candidato a la presidencia que hoy cuenta con serias opciones de ser presidente no tiene voluntad política para proteger los derechos de la mujer, pues, aunque diga que la mayoría de su gabinete era femenino (el 64% lo era), esto lo repite muchas veces como si se tratara de un favor o el regalo concedido a las mujeres no por su formación y capacidad sino como algo que deben agradecerle por haberlas incluido en su gobierno. O como cuando dice que su esposa maneja el 80% de las acciones de sus negocios como si no se supiera de miles de hombres que entregan la plata en el hogar, pero maltratan a la mujer física y psicológicamente por ese hecho.
Y más allá de sus declaraciones está su accionar y lo que piensa sobre la mujer, como cuando atacó la dignidad de las trabajadoras sexuales y a todas las mujeres de una comunidad al decir que cierto candidato a la alcaldía “estaba más manoseado que prostituta de Puerto Wilches”, lo cual generó el reclamo de toda esa población, sin olvidar que por ese entonces también dijo públicamente ante el aumento de la población migrante de venezolanos en Colombia que “las venezolanas eran una fábrica para tener chinitos pobres”.
Lo cierto es que la voluntad política a su salida de la administración municipal empezó a mostrar indicadores que lo dejan muy mal parado y que se empezaron a recuperar notablemente.
BUCARAMANGA | 2019 |
Violencia sexual | 471 |
Violencia intrafamiliar | 1.243 |
Feminicidio | 2 |
BUCARAMANGA | 2020 |
Violencia sexual | 68 |
Violencia intrafamiliar | 235 |
Feminicidio | 2 |
Un mandatario que no promueve, no protege ni promociona los derechos de la mujer automáticamente da vía libre para que ellas sean vulneradas y revictimizadas.
Esto es lo que está en juego en esta segunda vuelta y será el poder femenino el que decida quién será el próximo huésped de la casa de Nariño y como la llegada del nuevo mandatario las pondrá en el centro de todas las políticas del estado o si definitivamente como dijo Rodolfo Hernández “sirven más desde la casa criando a los chinos”.
@Nevil_22