Por: Público*
El rey Juan Carlos I introdujo durante años en España miles de euros en billetes por los controles del aeropuerto de Barajas (Madrid) provenientes de su fortuna secreta en Suiza. Este dinero lo traía desde Ginebra el abogado suizo Dante Canónica que lo llevaba al Palacio de La Zarzuela.
El abogado del monarca se desplazaba durante años desde Ginebra hasta Madrid en vuelos regulares de Iberia, según revela El Confidencial.
Su examiga Corinna Larsen confesó en 2016 al comisario jubilado José Manuel Villarejo que el entonces rey tenía en la Zarzuela una máquina de contar billetes. Esta grabación fue descubierta en el ordenador de policía nacional cuando fue detenido.
La revelación de Larsen forma parte de la segunda grabación que Villarejo realizó sin que ella lo supiera en Londres y que ha sido publicada por OK Diario.
En ella, Larsen se pregunta por qué el monarca no tiene a su alrededor "gente más competente". Y explica: "Toma el avión, va a los países árabes, y vuelve en el avión" con dinero "en efectivo, con maletas. A veces va con 3,4, 5 millones. El dinero está en Zarzuela, en su piscina, tiene una máquina para contar dinero. Lo he visto con mis propios ojos. Se pone como un niño... Yo no entiendo las operaciones que hacen, peligrosísimas", explica la empresaria, antes Corinna zu Sayn-Wittgenstein.
"Se muere por el dinero"
"Para el emérito el dinero es como una mala adi... se muere por el dinero", confiesa Corinna en octubre de 2016 a Villarejo en un restaurante italiano de Londres. "El paga todo incluso a su hijo, a sus hijas, a la mujer, en cash".
El rey Juan Carlos I introducía este dinero en metálico a través del aeropuerto militar de Torrejón, en Madrid. "El dinero entra por la base de Torrejón, es la manera como lo ha hecho todos estos años".
El abogado Dante Canónica, cuando aterrizaba en el aeropuerto de Barajas, en Madrid, iba a Zarzuela para entregar en mano a Juan Carlos de Borbón este dinero que sacaba de la cuenta de los más de 100 millones de dólares que el rey tenía ocultos en una cuenta del banco Mirabaud, parapetado a través de la Fundación Lucum, con sede en Panamá.
Se sospecha que las cantidades superaban el límite legal de entrada en efectivo en España, que está situado en 10.000 dólares.
El monarca visitaba paraísos fiscales cuando no le traían el dinero a Zarzuela.
Los recibos revelan que Juan Carlos de Borbón sacaba una media de 100.000 euros al mes de esta cuenta del banco Mirabaud entre 2008 y 2012, en los peores años de la crisis económica.
Juan Carlos I era el primer beneficiario de la Fundación Lucum, creada en 2008 por encargo personal suyo realizado desde su despacho del Palacio de La Zarzuela. No colocó como beneficiario a Felipe VI hasta tres años después, según publica El Español.
La Fundación Lucum tenía como primer beneficiario a Juan Carlos de Borbón y, a su muerte, al rey y sus hermanas. El pasado 15 de marzo Felipe VI anunció que se había enterado de esta circunstancia a través de los abogados de Corinna Larsen, la examiga especial del rey emérito, y que tenía intención de renunciar a esta herencia.
El fiscal suizo Ives Bertossa investiga la donación de Juan Carlos I a Larsen en 2012 del dinero que quedaba en la cuenta, unos 65 millones de euros. También investiga el origen de esta fortuna. Juan Carlos I sostiene que proviene de una donación del rey de Arabia Saudita, pero ella reveló al comisario jubilado José Manuel Villarejo que era una comisión pagada por la adjudicación a empresas españolas del AVE a La Meca.
La Fiscalía de Supremo ha abierto diligencias informativas a Juan Carlos I con el fin de determinar si existen delitos fiscales o de blanqueo de capitales por corrupción en las transacciones internacionales.
El ministerio público mantiene la premisa de que Juan Carlos I es inviolable hasta su abdicación, el 19 de junio de 2014. A partir de entonces, puede ser juzgado en el Tribunal Supremo.
Los hechos datan de fechas anteriores a 2014, por lo que el rey emérito estaría protegido por el manto de impunidad. Si como se sospecha Juan Carlos I no declaró la donación millonaria de Arabia Saudita, este delito fiscal habría prescrito este año.
Ahora bien, el delito fiscal continuado o el blanqueo podrían estar vigentes si se hubiera producido algunos movimientos de dinero posteriores.
*Este artículo fue publicado originalmente www.Pubilico.es con el titulo: Juan Carlos I metó en España mles de euros en billetes or avión u tenían una maquina de contar dinero en la Zarzuela.