La pandemia nos obligó a repensar en diferentes dimensiones el modelo de administración de justicia que teníamos y logró lo que no había podido hacer nadie antes, forzar el tránsito a la virtualidad de los despachos judiciales del país. El tránsito ha sido lento y ha tenido enormes dificultades, desde la falta de capacitación de los empleados y de los abogados en el manejo de ciertas herramientas digitales de la Rama Judicial, hasta la falta de recursos técnicos y operativos para prestar con eficiencia el servicio de manera digital. Pero se han sorteado muchas de estas dificultades y hasta ahora el avance ha sido significativo. Y hoy los despachos judiciales han logrado implementar la virtualidad de un modo más o menos exitoso, cada uno a su manera.
Una de las herramientas que más se han utilizado para dar acceso a los expedientes digitales, y en general para compartir información de los juzgados, son los vínculos[1] de OneDrive [2]. Muchos abogados ya se habían adecuado a ellos, empleándolos sin mayores dificultades. Sin embargo, desde hace varios días se han presentado errores al compartirlos y no ha sido posible que personas ajenas a la organización accedan efectivamente a la información compartida a través de ellos. Ante las quejas de los usuarios, varios juzgados elevaron consultas al grupo de informática del Consejo Superior de la Judicatura, quienes el día de ayer publicaron el comunicado denominado Indisponibilidad del servicio de OneDrive Corporativo, el cual se hizo viral en redes sociales.
En este se informa que, luego de un trabajo con el área de soporte de Microsoft, se evidenció un uso inadecuado de la herramienta OneDrive como repositorio público mediante algunas de las cuentas corporativas, por lo que se implementaron limitaciones en el uso de los vínculos y se bloqueó la sincronización en OneDrive de archivos de tipo .exe .mp4, .avi o cualquier otra extensión diferente a ofimática (entre las que se incluyen videos).
Estas medidas tomadas por la Unidad Informática de la Rama Judicial para “aliviar” los problemas de los vínculos constituyen un retroceso enorme en el proceso de implementación de la virtualidad. La limitación en el uso de los vínculos dificulta el acceso expedito de los usuarios a las actuaciones que se realizan en los juzgados. Los vínculos se utilizaban, entre otras cosas, para publicar las providencias judiciales en los estados electrónicos del portal web de la Rama Judicial, a los cuales debe tener acceso cualquiera que esté interesado en su consulta. Pero al limitar la opción de compartirlos con cualquier persona, se impide la inserción de la providencia en el estado respectivo. Y el bloqueo de la sincronización de archivos diferente a ofimática da una estocada al proyecto de expediente digital, que ya muchos despachos habían implementado exitosamente. ¿Cómo alojar en el expediente digital las grabaciones de las audiencias y otros archivos diferentes a ofimática que se aporten al proceso si OneDrive no permite su sincronización?
Si bien la rama cuenta con otra herramienta digital, como el aplicativo TYBA - Justicia XXI Web, el mismo es poco intuitivo tanto para registro de información como para su consulta. Además, es un programa que funciona deficientemente, se cae constantemente, es incompatible con diferentes antivirus y al cargar información se activan las alarmas de los antivirus, salen errores de proxy[3] y los escudos web del equipo bloquean la página de la aplicación.
Esta situación me recuerda una escena de El Castillo de Kafka: “El castillo allá arriba, extrañamente oscuro a esa hora, y que K había tenido la esperanza de alcanzar ese mismo día, se alejaba una vez más”. Es momento de que la Dirección Ejecutiva de la Rama Judicial se siente con el equipo de Microsoft a renegociar los productos y el soporte ofrecido, o que se plantee como opción la contratación de las herramientas digitales institucionales con otra empresa de tecnología que ofrezca un mayor conjunto de servicios y un mejor soporte. No debemos dejar que el castillo, extrañamente oscuro hoy, se aleje una vez más.
[1] También conocidos como hipervínculo enlace, hiperenlace o link.
[2] Servicio de alojamiento de archivos de la Rama Judicial.
[3] Servidor intermediario o puente entre el origen y el destino de una solicitud web.